Por IAA.-Esta semana se ha inaugurado en China una estación astronómica robótica de la red BOOTES, un proyecto liderado desde el Instituto de Astrofísica de Andalucía (CSIC). La estación se suma a otras tres localizadas en España y Nueva Zelanda. Las observaciones aportarán nueva información sobre los estallidos de rayos gamma y ayudarán a seguir fuentes de alta energía de forma simultánea con satélites espaciales.
Ayer se inauguró en el Observatorio Astronómico de Lijiang (China) la cuarta estación astronómica robótica de la red BOOTES (acrónimo en inglés de Observatorio de estallidos y Sistema de exploración de fuentes esporádicas ópticas), un proyecto liderado por el investigador Alberto J. Castro-Tirado (IAA-CSIC). La iniciativa cuenta ya con dos instalaciones en España y una en Nueva Zelanda y dispone hasta la fecha de tres telescopios de sesenta centímetros de diámetro para la observación del universo.
La financiación de BOOTES-4, obtenida por medio del Plan Nacional de Investigación (Ministerio de Economía y Competitividad), ha supuesto una inversión de más de 200.000 euros en equipamiento e incluye la caseta dotada de cúpula de apertura y cierre automático (desarrollada por una empresa española fruto de una patente donde el CSIC participa al 50%), el telescopio MET ultrarrápido de sesenta centímetros con la correspondiente montura, la cámara de todo el cielo CASANDRA-4 y los sensores meteorológicos, así como el correspondiente equipamiento informático.
El acuerdo firmado entre el CSIC y el Observatorio Astronómico de Yunnan, con sede en Kunming (del que depende el de Lijiang) y perteneciente a la Academia de Ciencias China, ha permitido la instalación de la estación astronómica española en suelo chino por un periodo de diez años. China mantiene la instalación dotándola de los servicios requeridos (asistencia técnica, electricidad y conexión a la red informática) y ha sufragado el desmonte del terreno y la cimentación previos a la instalación, en la que participaron técnicos españoles por un periodo de un mes. A cambio, investigadores del país asiático disponen del 15% del tiempo de observación de BOOTES-4 más un 5% del tiempo (en total) de otros telescopios de la red.
Se esperan resultados científicos importantes en el campo de los estallidos cósmicos de rayos gamma (GRBs) y también en lo que respecta al seguimiento y monitoreado de fuentes de alta energía de manera simultánea con los satélites espaciales.
La estación BOOTES-4 iba a ser instalada inicialmente en el Observatorio de Mondy en Siberia (Rusia), con el apoyo de la Academia de Ciencias de Rusia, pero un cambio en la ley aduanera rusa obligó a buscar otro emplazamiento en Asia. Finalmente fue elegido el Observatorio de Lijiang, a la misma longitud que el ruso (100 grados este) pero a una latitud similar a la de Canarias (27 grados norte).
A la inauguración asistió el cónsul español en la provincia de Cantón y contó con la representación del CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial, delegación en Shanghai) y del propio CSIC, en la persona del investigador principal del proyecto, Alberto J. Castro Tirado.
magen: IAA (CSIC).