Montevideo.- El BCU y el BID homenajearon esta noche a Enrique V. Iglesias, por su extensa trayectoria en ambas instituciones. Profesor universitario y conductor de la cooperación entre Iberoamérica y la comunidad internacional, Iglesias recibió muchas distinciones en su vida. El vicepresidente Astori lo definió como “un constructor de cercanías y un superador de distancias”.
En una ceremonia realizada este 18 de marzo en el Salón de Actos del Banco Central del Uruguay (BCU), personalidades destacadas que lo conocieron participaron de este homenaje mediante un video en el que lo definieron como: “Humanista”, “estudioso”, “visionario”, “creativo”, “líder”, “iluminado”, “defensor de la libertad”. Entre ellos estaban los ex presidentes de la República, Tabaré Vázquez; Luis Alberto Lacalle y Jorge Batlle.
El actual presidente del BCU, Mario Bergara, saludó a Iglesias, quien fue recibido con aplausos por los presente, y se mostró honrado de ser anfitrión en esta celebración.
Por su parte, el vicepresidente de la República, Danilo Astori, resaltó el lanzamiento del libro denominado “Enrique V. Iglesias, Intuición y ética en la construcción de Futuro”, realizado en su honor.
Astori recordó momentos de la trayectoria de Iglesias, enfatizó en su visión estratégica, intuición y sentido ético, como sus principales rasgos definitorios para su desempeño en muchas instituciones.
El vicepresidente de la República también destacó su participación como Secretario Ejecutivo de la CEPAL durante la transición en la dictadura de Chile, “época en la cual se desenvolvió con gran coraje e independencia de criterio y me consta que ayudó a mucha gente”.
Asimismo, subrayó que “fue uruguayo por elección y su generosidad lo hizo volver, estuvo siempre que el país lo necesitó”. Su rol como presidente del BID se extendió por 17 años e hizo historia, porque contribuyó decisivamente a darle una personalidad a esa institución, dijo Astori.
La preocupación por la cultura como factor de desarrollo económico y social y su compromiso por brindarle un reconocimiento a la “fuerza de la diversidad”, fueron sus ideales, recordó Danilo Astori. “Enrique fue un constructor de cercanías, un superador de distancias”, indicó.
El actual presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno, coincidió con los oradores que lo antecedieron en la extensa y destacada trayectoria de Iglesias y nombró algunos de los galardones que recibió durante su vid: En 1982 fue distinguido con el premio Príncipe de Asturias por su condición de excepcional conductor de los pueblos iberoamericanos. También recibió el Premio Pablo Picasso de la UNSECO.
En tan sentido, fue reconocido con varios Títulos de Doctor Honoris Causa de la Universidad de Liverpool de Inglaterra; la Universidad Autónoma de Guadalajara; la Universidad Europea de Madrid y la Universidad Andrés Bello de Chile. También fue distinguido internacionalmente en Francia; Estados Unidos y México entre otros países. Para Moreno, “Enrique sintetiza lo que es un bien común regional, la cara de Iberoamérica y el corazón del Uruguay”.
En una breve intervención, el ministro de Economía y Finanzas, Fernando Lorenzo, hizo referencia a cómo fue elaborado este homenaje en el que se pretendió tener la asistencia de personas que compartieron momentos con Iglesias.
Lorenzo reconoció las cualidades humanas de Iglesias y destacó que “fue una persona que destinó su vida a solucionar problemas, y en su gran mayoría los ajenos”.
A continuación, se anunció que por resolución del Banco Central la Sala de Actos pasará a llamarse “Enrique Iglesias” y se procedió al descubrimiento de una placa ubicada en una de sus paredes. El homenajeado recibió además una escultura del artista plástico Ricardo Pascal, también ex presidente del BCU.
Finalmente, Iglesias agradeció por los honores concedidos: “Me siento muy emocionado”, dijo. Resaltó el desarrollo excelente de la Reunión Anual del BID que se realiza en Montevideo en estos días y enfatizó en la calidez humana del pueblo uruguayo, “que recibe bien a todos los que lo visitan”.
El homenajeado reflexionó sobre la creación del Banco Central del Uruguay nacido en 1967, que hoy es uno de los más respetados de América Latina. “La democracia uruguaya se basa en este tipo de instituciones, comprometida con la sociedad”, aseguró. Agradeció a quienes lo acompañaron en los diferentes cargos que ocupó, y aseguró: “todo se lo debo a Uruguay, nunca estuve solo”.
