Por Luis José de Ávila.- Inicio este domingo desolado. Una llamada de mi colega de La Nueva España Elena Vélez me da la triste noticia: Esta noche falleció en la residencia sanitaria mi compañero José Vélez Abascal. El maestro del periodismo asturiano se había sentido mal hace un par de días siendo ingresado en dicho centro sanitario. Aunque nada hacía presagiar tan rápido desenlace esta madrugada falleció. No hacía ni 72 horas en que como era habitual en nuestros amigables encuentros discutíamos de política, sobre quien ganará las elecciones dentro de una semana. Se me ha ido un insustituible compañero de fatigas profesionales además de un gran amigo. En la última fiesta de los periodistas, a petición de la Asociación de la Prensa de Oviedo que le nombró socio de honor en premio a su larga e intensa vida como periodista, glosé su trayectoria ante casi dos centenares de colegas. ¿Que decir en estos momentos?. Vélez fue un autodidacta, un trabajador incansable, con un desarrollado sentido de la noticia que mantuvo vivo hasta el último momento. Aunque era celoso sobre su edad, me consta que los ochenta ya los había cumplido pero, aunque con algún que otro achaque en los últimos años, seguía al pié del cañón periodístico con su publicación “La Hora de Asturias” que precisamente ahora cumplía su 16 aniversario.
Comenzó como fotógrafo en los tiempos de la postguerra para ganarse la vida inmortalizando bodas y banquetes, pero el destino, por fortuna para mi bendita profesión, le llevó a la redacción del desaparición diario Región donde se forjó bajo la batuta de otro maestro del periodismo, Ricardo Váquez-Prada. Su buen hacer y entusiasmo profesional hizo que La Nueva España, cuando la dirigía Paco Arias de Velasco, al que siempre admiró, le fichase. Compaginó su trabajo en el principal diario de Asturias con la corresponsalía de Europa Press. Tan buenos eran sus reportajes que en varias ocasiones quisieron llevarle para Madrid pero José Vélez siempre tuvo claro que el jamás se iría de su Oviedín del alma como así ha sido.
Uno de los pilares de Hoja del lunes de Oviedo, la publicación de los periodistas que salía los lunes, fue su último director y como era persona inquieta y nada adocenada hace dieciséis años lanzó un gratuito mensual con gran éxito, “la Hora de Asturias” en la que he venido colaborado con mayor o menor asiduidad. Precisamente esta mañana me disponía a escribir una crónica sobre los acontecimientos políticos de nuestra comunidad autónoma que él me había pedido. El archivo fotográfico que deja recoge la historia de Asturias en todas sus facetas -desde políticos hasta deportistas- de los últimos sesenta años. Ciudadano amante de las tertulias, asistía a varias en La Goleta, en La Mallorquina, en Yuppi, con amigos de distinta procedencia. No perdía detalle de lo que ocurría en Vetusta y su curiosidad periodística no bajo ni un ápice con el paso de los años.
Se ha dado al circunstancia además que hace solo dos días había sido abuelo por tercera vez, nieto de su segunda hija Eva que lamentablemente no llegó ya a conocer. A su esposa Aurora, a sus tres hijas, mi abrazo solidario. Anonado aún por la noticia no me salen más palabras. Colega, descansa en paz. José Vélez ha fallecido utilizando con su inseparable cámara de fotos hasta el último momento. Lamento ser yo quien tenga que pisarle esta vez esta triste noticia,.
FOTO: José Vélez en un reciente homenaje que le dieron los periodistas asturianos, con el presidente de la Asociación de la Prensa de Oviedo, José Antonio Bron.
