El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro durante su intervención en el Foro ABC Deloitte y Ferrovial lanzó un claro mensaje de confianza sobre la economía española, tras reconocer la difícil situación en que se encuentra el país: "España es un gran país", afirmó el ministro y tiene potencial para salir adelante.
Su nivel de renta per cápita, tras haber crecido su población más de un 15%, es equivalente a la media de la UE-27, "algo que hace 15 años estábamos muy lejos de conseguir", afirmó el ministro. Su nivel de empleo y de afiliación a la Seguridad Social es un 50% mayor que el registrado en 1996, al tiempo que se trata de una economía altamente internacionalizada, que cuenta con unas inversiones equivalentes al 47% de su PIB en el exterior. Estos argumentos fueron expuestos por el ministro para descartar la imagen de una España en recesión incapaz de salir adelante.
"Es la España de las reformas", dijo Montoro para referirse a la agenda de reformas estructurales que mantiene abierta el Gobierno, todas necesarias para salir de la crisis. Así tuvo palabras para referirse a la importancia de la reforma financiera, la reforma laboral y especialmente a la reforma del sector público, cuyo primer objetivo va a ser el pago de las facturas pendientes. "No es admisible que haya facturas sin pagar en los cajones de las administraciones", señaló Montoro, por lo que defendió la inyección de liquidez de 35.000 millones de euros que va a aportar a la economía el plan para pagar a los proveedores de las AA PP.
Esta importante operación financiera va a tener un impacto económico en el empleo de entre 75.000 y 100.000 ocupados. También los proveedores tendrán prioridad en la próxima reforma del IVA, para que abonen este impuesto cuando cobren las futuras facturas y no cuando las emitan,como sucede actualmente.
No subirá el IRPF
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas también quiso dejar claro que no se va a salir de la crisis mediante subida de los impuestos y rechazó tajantemente que vaya a elevar nuevamente el IRPF y mantuvo el compromiso de que la subida decretada el 30 de diciembre también tiene fecha de caducidad: el 31 de diciembre de 2013.
En esta línea sostuvo que los Presupuestos del Estado para 2012 no tendrán subidas de impuestos inequitativas ni injustas, "ya que serían enormemente perjudiciales para la economía", explicó el ministro. En esta misma línea rechazó que se vayan a elevar otros tributos como los Impuestos Especiales o el IVA, precisamente ahora en un momento en que está reduciéndose la recaudación.
"El dinero no lo sacaremos de subidas de impuestos, sino de los lugares más neutros", añadió el ministro. Se manifestó a favor de que la Sanidad se cubra con los impuestos al tiempo que abogó por una mejora de la gestión, para que en ningún caso reciba de calificativo de "inviable".
En coherencia con los intereses comunes de la Unión Europea y del euro, la política económica del Gobierno cuenta con dos instrumentos básicos. El primero la consolidación fiscal y el desarrollo de la cultura de la estabilidad en todas las administraciones, el segundo las reformas estructurales. En materia de consolidación fiscal se han definido unos objetivos exigentes para este año y para el siguiente, con el acuerdo de la Comisión Europea que según el ministro, nos empujarán a un nuevo ciclo virtuoso de crecimiento y creación de empleo. "Europa es crecimiento, estabilidad y la oportunidad, nunca un sacrificio", afirmó el ministro en su intervención