La solicitud presentada por el fiscal de la Corte Penal Internacional para que se dicte orden de detención contra el coronel Muammar al Gadafi constituye un paso hacia la justicia para las víctimas de violaciones de derechos humanos en Libia, ha afirmado hoy Amnistía Internacional.

El fiscal, Luis Moreno-Ocampo, dijo el lunes que había pedido que se dictaran órdenes contra Gadafi, su hijo Saif al Islam y el jefe de la inteligencia militar, Abdallah al Sanussi, por crímenes de lesa humanidad de dos clases: asesinato y persecución.   

“La petición de estas órdenes de detención supone un avance hacia la justicia internacional y la rendición de cuentas en la región” ha manifestado Michael Bochenek, director de Derecho Internacional y Política de Amnistía Internacional.   

“No obstante, la comunidad internacional, que alcanzó un acuerdo sin precedentes para remitir el caso de Libia a la Corte Penal Internacional, no puede permitir que la justicia parezca selectiva. Desde todo punto de vista, lo que está sucediendo en Siria es tan grave como la situación que había en Libia cuando el Consejo de Seguridad remitió la situación de este país a la Corte Penal Internacional.”   

La investigación llevada a cabo por Amnistía Internacional en Libia desde febrero apunta a la comisión de posibles crímenes de lesa humanidad y crímenes de guerra.   

En febrero de este año, cuando comenzaron en Bengasi las protestas contra Gadafi a raíz de las manifestaciones desatadas en todo Oriente Medio y Norte de África, se inició una semana de homicidios y desapariciones forzadas de personas que presuntamente criticaban al gobierno.

Amnistía Internacional ha pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que preserve la neutralidad de la justicia internacional autorizando una investigación de la Corte Penal Internacional sobre el homicidio de cientos de manifestantes en Siria.   

“La justicia internacional, para ser real, tiene que ser para toda la población de Oriente Medio y Norte de África” dijo Michael Bochenek.

Si se emiten las órdenes de detención como está previsto, Amnistía Internacional pedirá al coronel Gadafi que se entregue para ser juzgado ante la Corte Penal Internacional. Todos los Estados miembros de la ONU estarían obligados a denegar un refugio seguro tanto a él como a sus coacusados.