La presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, ha destacado el papel en la defensa de las víctimas del terrorismo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado -Policía Nacional y Guardia Civil- a los que ha entregado el primer premio 'Verdad, memoria, dignidad y Justicia' otorgado por la Asociación Víctimas del Terrorismo durante los actos de clausura de su 30 aniversario en la Real Casa de Correos.  (Ver vídeo)

En la entrega de este galardón, que han recogido el Director General de la Policía, Ignacio Cosidó y el Director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, han estado también presentes el Ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz; la delegada de Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes; y el presidente de la Asamblea, Ignacio Echeverría; entre otras autoridades.

Aguirre ha manifestado que "un país que humilla a las víctimas y enaltece a los verdugos será siempre un país desdichado que ha perdido su norte moral" por lo que apela a los ciudadanos a no fallar a las víctimas del terrorismo, a las que considera "un ejemplo para todos" por confiar plenamente en la Ley y en el Estado de Derecho y "nunca tomarse la justicia por su mano". Además, respalda las victimas en su exigencia de justicia para que ningún asesinato quede impune, ya que, a su juicio, esta reclamación supone reivindicar “nuestra” propia dignidad.

Exposición sobre los 30 años de AVT

Tras la celebración de este homenaje a las Cuerpos de Seguridad, los responsables políticos acompañados por los miembros de la AVT, con su presidenta Ángeles Pedraza al frente, han recorrido la exposición con la que se clausurarán los actos conmemorativos del 30 aniversario de la Asociación y que estará abierta al público, en la Real Casa de Correos, hasta el 11 de Marzo.

Con el lema "30 años con las víctimas. Las víctimas en primera persona", 50 fotografías recogen la historia de la AVT desde su creación por parte de Sonsoles Álvarez de Toledo, Ana María Vidal Abarca e Isabel O'Shea. "Ellas –explica la presidenta- lideraron la rebeldía contra el miedo, la resignación y el silencio que rodeaban a las víctimas en los años de plomo, en aquellos ignominiosos años setenta y ochenta, en los que a los asesinados por ETA se les enterraba de forma casi furtiva".

Precisamente esta muestra recoge los testimonios de estas víctimas, pero además da la oportunidad a los ciudadanos de mostrar su apoyo mediante lemas escritos en post-it que se irán pegando en una mano vacía. En este sentido, la responsable regional ha pedido nuevamente a todos los ciudadanos su compromiso con las víctimas “no sólo como un deber ineludible de gratitud, sino como una exigencia irrenunciable de defender nuestra propia dignidad”.