Durante el pasado año 2011, investigadores de Greenpeace han realizado constantes visitas a la mayor planta de celulosa de Indonesia, Indah Kiat Perawang (de Asia Pulp & Paper), donde han localizado en el parque de maderas numerosos troncos de ramín mezclados con otras especies, a la espera de ser transformados en pasta de papel. Para asegurar la identificación, los investigadores tomaron 46 muestras de madera para su posterior análisis. Un experto internacional confirmó que la madera era ramín.
“Greenpeace ha pillado in fraganti a Asia Pulp & Paper. La investigación muestra cómo su principal fábrica de celulosa está llena de madera ilegal de ramín. Esta es una demostración de la poca seriedad de sus promesas de tolerancia cero con la madera ilegal”, ha afirmado Bustar Maitar, coordinador de la Campaña de Bosques de Greenpeace Indonesia.
Además, el análisis cartográfico realizado por Greenpeace muestra que desde que el ramín fue protegido internacionalmente en 2001 se han destruido unas 180.000 hectáreas de bosque de turbera en concesiones gestionadas por Asia Pulp & Paper, equivalentes a dos veces el tamaño de la ciudad de Nueva York. Estos bosques son un hábitat fundamental para el ramín y también para otras especies animales en peligro de extinción como el tigre de Sumatra, del que solo quedan 400 ejemplares en libertad.
La investigación también ha revelado que grandes empresas como Xerox, National Geographic y Danone estarían consumiendo productos fabricados con papel que, según un estudio independiente de trazabilidad, contienen fibra de maderas provenientes de los bosques tropicales de Indonesia. Greenpeace ha podido determinar que estas compañías consumen papel de plantas de celulosa de APP que se abastecen de la fábrica de Indah Kiat Perawang.
“APP está incumpliendo la legislación en Indonesia. Greenpeace exige al Gobierno de Indonesia que embargue de forma inmediata toda la madera de ramín ilegal en las operaciones que APP lleva a cabo en este país. Estas evidencias se han facilitado a las autoridades para ayudarles en su esfuerzo de mejorar la gobernanza en el sector forestal. Cualquier empresa que compre a APP debe distanciarse de este escándalo forestal internacional y dejar de consumir sus productos hasta que cambien su gestión”, ha añadido Bustar Maitar.
Greenpeace apoya una moratoria a la deforestación de bosques de turberas, tal como se propone en un informe oficial del departamento del Gobierno de Indonesia responsable de la protección del ramín. La filial del mismo grupo que APP dedicada a la producción de aceite de palma, GAR, está implementando una política para acabar con la deforestación, incluyendo la tala de los bosques de turberas.