La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos urgió hoy a un alto el fuego inmediato en Siria para permitir el ingreso de ayuda humanitaria. Durante un debate de emergencia sobre la situación en ese país convocado por el Consejo de Derechos Humanos, Navi Pillay dijo que la situación se deteriora rápidamente.
Destacó que las fuerzas militares y de seguridad participan de campañas de arresto masivo y detención arbitraria de miles de manifestantes, así como de activistas de derechos humanos.
Mencionó además ataques armados por parte de la oposición contra las fuerzas del gobierno que han tenido su impacto en la población civil, según informes enviados por las autoridades sirias a su Oficina.
La Alta Comisionada reiteró su llamado de remitir el caso a la Corte Penal Internacional en vista de las violaciones de esas garantías básicas que se siguen cometiendo en ese país árabe.
“También dirijo un llamamiento al gobierno de Siria a permitir que observadores internacionales independientes visiten todos los lugares de detención y permitan el acceso sin trabas a los actores humanitarios”, declaró Pillay.
Además pidió a las autoridades una investigación pronta, independiente e imparcial, de conformidad con las normas internacionales, para poner fin a la impunidad y llevar a los perpetradores de abusos ante la justicia.
UN Photo/Jean-Marc Ferré