Desde el día 29 de Enero hasta el pasado martes 21 de Febrero, la Confederación Hidrográfica del Ebro ha procedido al corte de agua en el Canal Imperial de Aragón para la limpieza y conservación de esta infraestructura artificial creada en el año 1782 y destinada principalmente al regadío. Pero es en estos días de corte cuando los técnicos del Departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón aprovechan y acometen importantes trabajos para el estudio y conservación de la margaritona (Margaritifera auricularia).
Actualmente se conocen poblaciones de la especie M. auricularia en algunos ríos franceses y en la cuenca del Ebro. La población aragonesa es la más importante, tanto por el número inventariado de ejemplares, como por ser la única de la que se tiene noticia en los últimos años de existan individuos juveniles.
Los cortes periódicos del Canal Imperial y del Canal de Tauste ofrecen la posibilidad, una o dos veces al año, de estudiar la población de una especie que vive en un medio difícilmente accesible.
Los trabajos desarrollados por biólogos, técnicos y Agentes de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón han consistido principalmente en prevenir la muerte directa de individuos en las obras acometidas durante estos días pasados. Un especial cuidado se ha tenido este año para garantizar un volumen de agua suficiente, con cierta profundidad, que evitase que las bajas temperaturas registradas tras la pasada ola de frío pudieran afectar drásticamente a estos moluscos protegidos. El censado de nuevos individuos y su marcaje, el seguimiento poblacional para conocer parámetros como el crecimiento, la mortalidad natural, la afección de las especies exóticas invasoras o el estudio del hábitat son algunos de los aspectos que se están abordando en Aragón para evitar la extinción de dicha especie animal.
Los trabajos continuarán durante una semana más en el Canal de Tauste, el otro canal de riego con presencia de la especie.
La margaritona (Margaritifera auricularia). Plan de Recuperación
Esta gran almeja de agua dulce que se consideraba extinguida en casi todos los grandes cauces fluviales de Europa donde una vez vivió, reapareció de nuevo superviviente en aguas de Aragón en el año 1996.
La margaritona, incluida en el Catálogo de Especies Amenazadas de Aragón como “En peligro de extinción”, cuenta en Aragón con un Plan de Recuperación desde el año 1994, donde se contemplan medidas y acciones para la conservación de esta especie y su hábitat natural.
En la finca de La Alfranca el Departamento de Agricultura, ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón está experimentando su cría en cautividad, dentro de un complejo ciclo vital., pues sus larvas -denominadas por los científicos “gloquidios”- requieren de un “pez huésped” intermedio para su desarrollo. Instaladas durante casi tres meses en las branquias del huésped –en este caso un blenio o un esturión-, las larvas sufren una metamorfosis que las transforma en pequeños juveniles que acaban desprendiéndose del pez que les aloja y alcanzan el fondo del río, donde se entierran durante los primeros meses de vida hasta emerger del fondo donde vivirán parcialmente enterradas entre el suelo o sedimento
Fotos: E. Viñals