La candidata del PP a la Presidencia del Principado, Isabel Pérez-Espinosa, reclamó  al candidato socialista, Javier Fernández, la celebración de un debate, “en el medio que quiera”, público o privado, “porque los asturianos tienen derecho a conocer las propuestas de los dos partidos”. Pérez-Espinosa planteó la propuesta esta tarde, durante una visita a Libroviedo acompañada por Gustavo de Arístegui, portavoz del PP en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados.

Pérez-Espinosa señaló que “la única alternativa que representa el cambio es la del PP”, que el partido “ha ido desgranando sus propuestas y proyectos” y que otras opciones políticas “no defienden más que el continuismo para Asturias y continuamente manipulan o tergiversan las propuestas del PP”. Por ello, solicitó “un debate público en el medio de comunicación que Javier Fernández quiera” y recordó que ella dijo ya el pasado mes de enero estar dispuesta a celebrarlo: “Espero su respuesta desde entonces estamos lo suficientemente de las elecciones para que conteste ya”.

Creación de empleo

Por otra parte, el viernes,  Isabel Pérez-Espinosa, presentó el apartado económico del programa electoral para Asturias durante una rueda de prensa en la que planteó una política económica “coherente y centrada en la estabilidad presupuestaria, que gestione los recursos públicos de forma austera y eficiente y que favorezca el gasto productivo, en inversiones, frente al gasto corriente”.
 
El objetivo prioritario para los próximos cuatro años, destacó Pérez-Espinosa, es la creación de empleo, para lo que se facilitará la actividad económica “a través de rebajas fiscales, la simplificación administrativa y los incentivos a la contratación, medidas contra la morosidad y mejora de la financiación”.
 
Entre otras propuestas, se plantea la “reforma de las políticas activas de empleo, en su gestión y evaluación, dando un papel relevante a los Ayuntamientos; la creación de un verdadero sistema de evaluación de la eficacia de las políticas activas de empleo; dedicar más recursos a las políticas de intermediación y gestión de colocaciones; hacer de la formación para el empleo la prolongación natural de la formación inicial, de modo que se haga realidad la política europea de aprendizaje a lo largo de toda la vida; la introducción de sistemas que mejoren la transparencia en la gestión de los recursos económicos dedicados a la formación en función de criterios y de objetivos de calidad y de eficiencia; el desarrollo de un Proyecto Específico de Empleo para los sectores peor tratados por la crisis: mujeres, jóvenes, parados de larga duración y mayores de 45 años; priorizar dentro de los Planes de Empleo autonómicos los destinados específicamente a los jóvenes, reforzando las ayudas a la contratación en prácticas y para la formación, dando ayudas a la transformación de contratos de formación en indefinidos, ayudando a la contratación indefinida de jóvenes, con preferencia en las contrataciones que se produzcan en los sectores especialmente castigados por la crisis económica; mejorando líneas de fomento del empleo y del autoempleo de jóvenes, así como las de fomento a la incorporación como socios menores de 35 años a las cooperativas  de trabajo y sociedades laborales; estableciendo un Plan Retorno para recuperar a jóvenes asturianos que hayan tenido que emigrar por razones laborales y elaborando un Plan de Creación de Empleo ligado a la aplicación de la Ley de Dependencia”.
 
Junto a las propuestas para reducir la tasa de paro en la región, entre las que destacan las de apoyo a la iniciativa empresarial que incluyen “una política fiscal centrada en la reducción de impuestos”, el programa económico para los próximos cuatro años plantea medidas para favorecer la actividad de las empresas y la internacionalización de la economía asturiana.
 
Otro de los apartados del programa plantea la redacción de un plan energético regional “que sirva para la determinación de las necesidades energéticas de Asturias, garantice el suministro, potencie el aprovechamiento de los recursos endógenos y sirva para planificar las inversiones”, indicó Pérez-Espinosa, quien también afirmó que “apostaremos por el desarrollo en Asturias de un sector industrial tecnológico de desarrollo de procesos de captación, transporte y almacenamiento del CO2 como garantía de continuidad del uso del carbón en el mix energético nacional”.
 
En cuanto a las infraestructuras, se plantean medidas para hacer que Asturias “esté mejor conectada con el resto de España y abierta al mundo, facilitando el trabajo y la competitividad de nuestras empresas y emprendedores y haciendo de la región un referente en el sector servicios y turístico”. El plan integral en esta materia incluirá “la creación de nuevas infraestructuras y la mejora y mantenimiento de las existentes. El objetivo prioritario de este Plan será la mejora de las comunicaciones regionales y en este sentido, la situación económica del Principado será determinante”.
 
Pérez-Espinosa afirmó que “vamos a superar de una vez por todas las asignaturas pendientes en las infraestructuras asturianas. Exigiremos al Gobierno de la Nación la finalización de los tramos pendientes de la Autovía del Cantábrico, con el establecimiento de un calendario de plazos y de la financiación adecuada”, a lo que añadió “si fuera necesario, se negociará con el Gobierno de España la utilización de los remanentes de fondos mineros paralizados con compromisos de reversión para inversiones en municipios mineros a partir de 2012