El día 23 a las 17 horas un individuo entró en una farmacia de Oviedo y tras amenazar a la farmacéutica con un destornillador intentó sustraer el dinero que había en la caja registradora. Justo en ese momento fue sorprendido por el propietario que salía de la rebotica.

El ladrón le dio un empujó y el señor cayó sobre una estantería de cristal que le provocó una herida en la espalda de carácter leve. Esta situación fue aprovechada por el ladrón para llevarse la caja registradora.

Una vez que la Policía Nacional de Oviedo tuvo conocimiento de lo sucedido puso en marcha el protocolo de actuación ante la comisión de un atraco. Como primera medida se intensificó la vigilancia de las calles por donde pudiera huir, cerrando y controlando las principales vías de enlace de la ciudad.

Rápidamente se procedió a distribuir las características físicas que se poseían a todas las Fuerzas de Seguridad, formando, seguidamente un equipo multidisciplinar, integrado por miembros de seguridad ciudadana, policía judicial y policía científica que se desplazaron hasta la lugar para iniciar la investigación, recogiendo indicios y pruebas que pudieran determinar la identidad del presunto atracador.

   Minutos más tarde y gracias a la colaboración de muchos ciudadanos que facilitaron información a las patrullas del Grupo de Atención al Ciudadano sobre la dirección de huída del ladrón, éste fue localizado en un bar ubicado en la calle Bermúdez de Castro, donde se había refugiado en un intento por pasar desapercibo.

 El individuo antes de entrar, había arrojado en la calle Albéniz la caja registradora y el destornillador con el que había amenazado a la farmacéutica. La caja fue recuperada junto con los 200 euros que había en su interior.

   Fue detenido como presunto autor de un delito de robo con intimidación. Se trata de un hombre de 32 años, natural de Oviedo y con domicilio en esta ciudad. Le constaban detenciones anteriores por robo.