También participaron del encuentro los secretarios de Industria, Eduardo Bianchi, y de Comercio Exterior, Beatriz Paglieri; el titular de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Ricardo Echegaray; y el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler.
Giorgi reiteró que “Argentina no es un problema para Brasil, sino que es parte de la solución” y aseguró que “ambos gobiernos deben impedir que las empresas multinacionales sigan tomando decisiones de acuerdo a la renta global, buscando licuar las crisis de sus países de origen con las ganancias que obtienen en el Mercosur”.
En el mismo sentido, los funcionarios afirmaron que la Ventanilla Única Electrónica “permitirá dar certeza al comercio con Brasil".
La ministra de Industria afirmó que durante el encuentro con la funcionaria brasileña, Argentina recordó la necesidad de equilibrar la balanza comercial, ahora deficitaria para nuestro país, en especial en el sector automotriz - autopartista.
Para eso, crearán una comisión con el objeto de acordar los criterios para que ambos países le exijan a las terminales criterios uniformes para asignar los costos de las autopartes y, de esta manera, hacer una comparación equitativa de precios a fin de que las terminales elijan donde comprarlas.
Además, y como consecuencia de la reunión que Giorgi mantuvo la semana pasada con el titular de la Federación de Industriales del Estado de San Pablo (Fiesp), Paulo Skaf, junto al ministro de Economía, Hernán Lorenzino, se acordó que un grupo de empresarios brasileños realice una misión al país para comprar autopartes.
También se trataron temas como el avance de las 100 posiciones arancelarias de los países del Mercosur y la revisión de las preferencias que tiene Brasil en el tratado automotriz del Mercosur con México. Y se avanzó en la posibilidad de acordar ventas de barcazas y remolques argentinos a Petrobras.
Giorgi explicó que “hay un potencial de u$s 31.000 millones en manufacturas de origen industrial que Brasil importa del mundo y podría hacerlo desde nuestro país, de los que un 20% podrían ser abastecido en forma inmediata”. “Argentina y Brasil deben seguir trabajando en conjunto para capturar el comercio intrarregional”, subrayó.
En diciembre pasado, la ministra entregó a su par brasileño, Fernando Pimentel, un listado de 436 posiciones arancelarias de manufacturas de origen industrial que Brasil importa del mundo por u$s 37.000 millones, de los que sólo 6.100 millones son de Argentina (de donde surge la posibilidad de sustituir u$s 31.000 millones).
Durante el encuentro, los funcionarios afirmaron que la resolución 3252, que creó la Declaración Jurada Anticipada de Importación (DJAI), “permitirá dar certeza al comercio con Brasil”.
Asimismo, Giorgi reiteró la necesidad que tienen los productos argentinos de conseguir un acceso más fluido al mercado brasileño.