• Los gestores han forzado el aplazamiento del Patronato de la Fundación, que no se reúne desde el pasado mes de junio, y se han acogido unilateralmente a un expediente de regulación de empleo

• La Consejería de Cultura y Deporte lamenta el espectáculo poco edificante que está protagonizando Joaquín Aréstegui al defender la cesión del complejo cultural a una fundación que llegó a calificar de “chiringuito socialista” y de “niemeyermocho”

OVIEDO. El Gobierno del Principado de Asturias considera que los últimos movimientos realizados por la Fundación del Centro Niemeyer ponen en evidencia que esta entidad “está secuestrada” por sus gestores, que han decidido “sin encomendarse a nadie” la suspensión de la reunión del patronato convocada para hoy y se han acogido “unilateralmente” a un expediente de regulación de empleo temporal “sin contar con el visto bueno de los patronos”. La Consejería de Cultura y Deporte entiende, por otra parte, que en las últimas semanas se han producido una serie de iniciativas políticas por parte del PSOE y el PP que parecen atender a una “estrategia conjunta de manipulación” que demuestra su nula voluntad de resolver por la vía del diálogo el conflicto generado en torno al complejo cultural avilesino.

• Sobre la suspensión del patronato. El Principado quiere expresar su desacuerdo con esta decisión, que no ha sido consultada con los patronos, y recuerda que el Patronato de una fundación que en 2011 manejó un presupuesto superior a 3 millones de euros no se ha reunido ni una sola vez en los siete meses que llevamos de legislatura, a pesar de la imperiosa necesidad de conocer el estado económico-financiero de la fundación, para cuyo conocimiento exacto esta Administración reclamó la realización de una auditoria externa. Se da la circunstancia de que los tres patronos fundadores del Centro Niemeyer -el Principado, la Autoridad Portuaria de Avilés y el Ayuntamiento de Avilés­- estaban en contra del aplazamiento de esta reunión. En los últimos meses se han producido hechos relevantes con indudable trascendencia para el funcionamiento y futuro de la Fundación que deberían ser conocidos y abordados en una reunión del patronato: informe negativo de legalidad del protectorado de fundaciones respecto a la inscripción de los cambios estatutarios llevados a cabo en febrero y junio de 2011; inicio de expedientes de reintegro de las subvenciones otorgadas por el Principado de Asturias en los ejercicios 2007 a 2010; negativa del Principado a formalizar la cesión del centro con la incidencia que ello tiene sobre el futuro de la Fundación… Con independencia de éstos y otros asuntos de indudable relevancia para el futuro de la Fundación, ésta está obligada legalmente (art. 25.8 de la Ley de Fundaciones) a elaborar, aprobar y remitir al protectorado de fundaciones en los últimos tres meses de cada ejercicio un plan de actuación de la Fundación en el que queden reflejados los objetivos y las actividades que se prevén desarrollar durante el ejercicio siguiente. Pues bien, esta obligación ha sido incumplida por la Fundación en 2011.

• Sobre el apoyo del PP a los gestores de la Fundación.  En relación con la actitud del Presidente del PP de Avilés y diputado regional, Joaquín Aréstegui, conviene recordar que hace unos años este parlamentario vertió toda suerte de acusaciones contra la misma Fundación Niemeyer a la que ahora defiende con vehemencia. Aréstegui llegó a definir de “nieyermocho” y de “chiringuito socialista” el proyecto del complejo avilesino e incluso denunció la contratación de la empresa Instituto Cies para la realización de un estudio sobre la repercusión del Centro Internacional Oscar Niemeyer al estar ligada a su Gerente, Natalio Grueso. «Es escandaloso que se adjudique a una sociedad del gerente del Niemeyer un estudio que diga lo bueno que es el Niemeyer», manifestó en su día Aréstegui, que defiende ahora la cesión de los edificios, pagados con el dinero de todos los asturianos, a la Fundación y se atreve incluso a cuestionar el coste de las actividades programadas para este trimestre por la Consejería de Cultura y Deporte en el Centro Cultural Internacional Avilés, a pesar de que ésta es la primera vez que se hace pública la cuantía de la programación (92.500 euros), que ha supuesto una quinta parte de lo que costó la exposición ‘La Luz’.

• Sobre la suspensión temporal de contratos de trabajo de la Fundación. De acuerdo con los poderes que constan inscritos en el Registro de Fundaciones, el Director del Centro Niemeyer, Natalio Grueso, ostentaría poder para tramitar la autorización administrativa previa de la suspensión colectiva de los contratos de trabajo del personal de la Fundación, el habitualmente conocido con el nombre de expediente de regulación de empleo. Ahora bien, Grueso no podría solicitar una autorización administrativa para suspender su relación laboral especial. Para ello tendría que hacerlo el patronato a quien corresponde la competencia para acordar esta suspensión, dado que no consta un poder especial otorgado al Presidente para decidir sobre la suspensión de la relación laboral especial del Gerente de la Fundación. En definitiva, Natalio Grueso como Gerente de la Fundación tendría poder para solicitar la autorización administrativa previa y acordar posteriormente la suspensión de la relación laboral del personal de la fundación, pero lógicamente no podrá  hacerlo respecto a su propia relación laboral especial de alta dirección. Por lo tanto y en tanto en cuento el Patronato no se reúna y lo acuerde, su relación laboral se mantiene en vigor.  

• Sobre el encargo anunciado por el Presidente de la Fundación respecto a la realización de dos auditorías. La realización de una auditoría de las cuentas está establecida preceptivamente en los estatutos de la Fundación Niemeyer. Ahora bien, el nombramiento de dicho auditor es competencia exclusiva del patronato y deberá realizarse antes del inicio del ejercicio en que se va auditar, con sujeción a los periodos de contratación previstos en la Ley de auditoría de cuentas. También se prohíbe expresamente revocar a los auditores de cuentas antes de que finalice el periodo para el que fueron nombrados. Mucho nos tememos que con este anuncio de realización de dos auditorías traten de "elegir" a un auditor que les facilite un informe favorable a los intereses de la Fundación que probablemente será publicado oportunamente antes de las elecciones autonómicas. El reglamento de la Ley de Fundaciones da al registro de fundaciones mecanismos para intervenir en caso de que no se hubiera designado auditor conforme al procedimiento anterior, facultando incluso al registro de fundaciones a designar el auditor.

• Sobre los principios de transparencia en la gestión del complejo cultural. El Gobierno del Principado de Asturias se ha visto obligado a tomar las riendas del complejo avilesino desde el pasado 15 de diciembre al negarse el Ayuntamiento de Avilés a que se realizara una auditoria externa y para rescatar un centro “secuestrado” a los intereses públicos, y cuya deriva anunciaba un cercano colapso al no hacer frente ni siquiera a sus compromisos más básicos, como el pago a algunos proveedores. No ha sido la acción gubernamental en absoluto caprichosa, sino consecuencia del conocimiento de la grave situación en la que estaba la institución, que reclamaba una alternativa inmediata. Esta alternativa, guiada por una gestión transparente, busca dar utilidad objetiva a la acción realizada en el Centro, teniendo como eje único los intereses culturales, económicos y sociales de Avilés y su comarca, y de toda Asturias. La actitud del Gobierno autonómico es una llamada a la responsabilidad de los gestores públicos para dar la respuesta más útil y honesta a la exigencia ciudadana de acciones que atiendan a todos los ámbitos de la creación cultural sin despegarse de una realidad que, como la que hoy nos condiciona, extrema la escasez de fondos públicos en una coyuntura de severa crisis económica.