El gobierno recibió con entusiasmo la declaración sobre la necesidad de un acuerdo pacífico por la cuestión Malvinas entre Argentina y Gran Bretaña realizada por la administración Obama", que alienta a que ambas partes resuelvan sus diferencias a través del diálogo diplomático, señaló el canciller. Desde Managua, Nicaragua, Héctor Timerman también dijo a Télam que "el no reconocimiento por parte del gobierno norteamericano de la pretensión británica de soberanía sobre las islas muestra que es necesario que Inglaterra se siente a la mesa de negociaciones con nuestro país, como instan las resoluciones de las Naciones Unidas para abrir un diálogo bilateral".

También enfatizó que "estamos seguros que toda América Latina se une en beneplácito por la posición de Estados Unidos sobre Malvinas".

Previamente, en Washington, durante una conferencia de prensa, la vocera de la Cancillería estadounidense Victoria Nuland sostuvo que para la administración del presidente Barack Obama la controversia sobre la soberanía de Malvinas es “un asunto bilateral que tiene que ser resuelto directamente entre los gobiernos de Argentina y Reino Unido”.

“Alentamos a ambas partes a resolver sus diferencias a través del diálogo en canales diplomáticos normales”, manifestó la portavoz cuando respondió consultas de la prensa sobre la posición de Estados Unidos acerca de las "recientes posiciones" adoptadas por ambos países sobre la soberanía de las Islas Malvinas, consignó un comunicado de prensa oficial en Washington.

Por su parte, el embajador argentino en Estados Unidos aseguró que "se está trabajando para crear las condiciones políticas para destrabar la negociación sobre Malvinas", recordando que la ONU y la OEA ya se manifestaron a favor del diálogo y que "si no hubo hasta ahora, fue porque Gran Bretaña se negó".

Sobre la reunión que tuvo con el presidente norteamericano, Barack Obama, dijo que "se habló de Malvinas y le agradecí la solidaridad que permanentemente su país expresa en la OEA cuando se trata el tema; le reiteré la buena voluntad argentina para sentarse a negociar"