Los de Valero Rivera supieron sufrir y aguantar los arreones rusos
La selección española de balonmano derrotó a Rusia (30-27) en el tercer partido del Campeonato de Europa de 2012, de Serbia, firmando la clasificación, con tres puntos, para la Main Round.
Después de iniciar el partido con muchas dudas, la selección nacional fue capaz de conseguir un parcial demoledor (7-1) para distanciar a Rusia, con una exhibición más de capacidad defensiva. Además, la defensa caucásica sufría, y mucho, con las transiciones del combinado español, muy veloces, gracias a la participación de Parrondo y Ugalde.
Así, al descanso, la diferencia en el marcador era de seis goles (17-11).
En el segundo tiempo, la aparición en portería de Grams fue decisiva para cambiar el rumbo del partido, junto con la precipitación en varios ataques del combinado español. Así, a falta de 15 minutos para el final, la distancia en el marcador era mínima (22-21).
Sin embargo, en el momento más importante del duelo, Cañellas fue un verdadero líder, anotando en escorzo, asistiendo a compañeros muy bien ubicados y, en definitiva, guiando el caminar del combinado español para conseguir un triunfo muy valioso.