•    Han sido detectados en Oviedo y en Mieres. En los dos casos  han elegido a chicas jóvenes, estudiantes con teléfonos móviles de última generación.

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El día 17 a las 16:00 horas, una dotación del Grupo de Atención al Ciudadano de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Oviedo, fue enviada a la Plaza Llamaquique donde al parecer se acababa de cometer un hurto.

Una vez en el lugar, se entrevistaron con una joven de 21 años, que les manifestó que hacía unos momentos, tres jóvenes de nacionalidad marroquí le habían sustraído su teléfono. Al parecer estos jóvenes, bien vestidos, se le habían acercado con la intención de solicitarle su firma para colaborar con una Asociación de Sordomudos. Tras entretenerla le sustrajeron su teléfono móvil, sin que se diera cuenta.

No fue la última vez que actuaron ese día. Una hora más tarde, en el interior de la Biblioteca del Campus de Mieres, los tres jóvenes se acercaron a una joven que estaba estudiando y tras entretenerla colocándole de forma insistente unas carpetas delante de la cara, donde al parecer tenía que firmar, se marcharon. Al momento, comprobó que le había desaparecido de encima de la mesa su teléfono móvil.

Hacerse pasar por una Asociación de Sordomudos para hurtar la cartera o el teléfono móvil a ciudadanos bienintencionados,  no es una modalidad nueva en Asturias, de hecho en junio del año pasado, la Policía Nacional de Oviedo detuvo a dos mujeres de nacionalidad rumana que se encontraba en la calle Marqués de Pidal  solicitaron la firma de los viandantes para colaborar con una “Asociación Regional para los discapacitados sordomudos y los niños pobres”. Fueron detenidas justo cuando intentaba robar el monedero a una mujer de 83 años a la que estaban entreteniendo mientras firmaba.

La Jefatura Superior de Policía de Asturias recuerda que esta forma de actuación, además de constituir un hecho delictivo está causando un grave perjuicio para la imagen de las Asociaciones de Personas Sordas que ni trabajan, ni recaudan fondos de esa forma.