El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha supervisado las pruebas realizadas en el Patio de los Leones para la puesta en marcha del renovado e innovador circuito hidráulico del palacio nazarí, cuya restauración permitirá que los leones de la Alhambra y la fuente que custodian vuelvan a verter agua de la colina de la Sabika.
Con estas pruebas, realizadas por el Servicio de Conservación del Patronato de la Alhambra y Generalife, culmina el proceso de restauración de esta joya escultórica nazarí concebida por el sultán Muhammad V en la segunda mitad del siglo XIV. La fase final de la intervención en el Patio de los Leones se completará con la pavimentación del Patio, que lo hará accesible al público a partir de la próxima primavera.
Griñán ha destacado que el conjunto monumental de la Alhambra y el Generalife constituye un "ejemplo de gestión sostenible" y un "gran proyecto cultural" que se pone de manifiesto con actuaciones como la restauración del Patio de Los Leones, cuyas obras, en su fase final, ha visitado.
El presidente ha recordado que la Alhambra batió en 2011 récord de visitantes, con 2,3 millones, y que continúa siendo, así, el monumento más visitado de España.
El presidente de la Junta ha valorado la "innovadora" intervención en el Patio de los Leones, que ha estado guiada por el "principio de autenticidad" y ha permitido conocer mejor "el extraordinario conjunto monumental", demuestra "el enorme grado de avance de las industrias culturales andaluzas", puesto que en la obra han participado 33 empresas y se han creado 42 puestos de trabajo.
Para José Antonio Griñán, esta intervención "consolida a la Alhambra como modelo internacional de gestión patrimonial" y constituye "una muestra más del esfuerzo del Gobierno andaluz por convertir la cultura y el enorme patrimonio monumental de la comunidad en fuente de riqueza para todos".
La restauración de las doce esculturas de los leones ha eliminado gruesas costras calcáreas que las recubrían ha detenido la invasión de elementos biológicos, ha consolidado roturas de diverso origen, y ha permitido retirar elementos metálicos y adherencias acumuladas a lo largo del tiempo y muy perjudiciales como el cemento. Además, ha proporcionado valiosa información de cara a la interpretación artística, histórica y simbólica del conjunto nazarí.
La intervención ha sido realizada por un equipo multidisciplinar integrado por técnicos del Servicio de conservación de la Alhambra, del Instituto del Patrimonio Cultural de España y del Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, junto a profesionales de la Escuela Superior de Ingenieros de Sevilla y del Departamento de Sistemas y Lenguajes informáticos de la Universidad de Granada y del equipo del arquitecto Pedro Salmerón coordinado por la dirección del Patronato de la Alhambra y Generalife.
El principio de autenticidad que ha guiado la intervención de la Fuente de los leones ha puesto de manifiesto el proceso minucioso y detallista que se siguió en la ejecución de esta joya escultórica de mármol blanco de Macael. De hecho, la casida o poema que recorre el borde de la taza ha sido fundamental para interpretar correctamente el funcionamiento estético de la propia fuente en su diseño originario.
El renovado circuito hidráulico de la Alhambra
Por su parte, la restauración del circuito hidráulico, última fase del proceso iniciado en 2002 con la retirada del León número 4 que fijó la metodología de intervención, ha consistido en la sustitución de las canalizaciones precedentes de alimentación de agua de cada una de las ocho fuentes –tanto las situadas en las Galerías y en los Pabellones de Levante y Poniente, las emplazadas en las salas de Dos Hermanas y Abencerrajes, y la central de los Leones-, así como en la limpieza y adecuación de las fuentes de piso y los canales que discurren por la superficie.
Como novedad, el circuito contará una red autónoma del resto de los Palacios de la Alhambra, debido a razones de conservación, y con un control de la calidad del agua y sostenibilidad del sistema gracias a la recirculación del caudal que la abastece.
Estos trabajos, que han sido ejecutados en coordinación con una investigación arqueológica desarrollada en todo el ámbito del Patio, han incluido también el levantamiento parcial de los pavimentos afectados por el paso de instalaciones, y la limpieza y consolidación pétrea de las distintas fuentes.
Además, a partir de ahora, cada León va a contar con una nueva canalización hidráulica formada por un tubo de silicona armada que va a discurrir por el canal original que existe en el interior y se conecta al surtidor de la boca realizado en acero inoxidable sin abrillantar y con remate de perfil cóncavo. La conexión se realiza a través del orificio situado en la parte inferior de la pata delantera izquierda de la escultura junto a la que se emplaza una pequeña arqueta de registro, que cuenta con una llave de corte y un regulador dinámico de caudal por cada León que fijará la posición exacta de cada uno de los chorros en su caída.
Para la reinstalación e incorporación al nuevo sistema de distribución de agua de la Taza, una pieza única con peso de 2,10 toneladas sin agua y de 3,30 toneladas llena, ha sido necesario su desmonte mediante un sistema de elevación hidráulica sobre una vagoneta de precisión. Además, el surtidor medieval colocado en el centro de la taza, cuyo peso es de 90 kilos, ha permitido recuperar la funcionalidad de esta pieza.
Con el objetivo de garantizar un perfecto estado de conservación en los Leones y la Fuente, el Patronato de la Alhambra y Generalife va a contar con un equipo de conservación preventiva especializado y de última tecnología. Entre las medidas que se llevarán a cabo se encuentra la dotación de un equipo de instrumentación ubicado en el propio Patio, para la toma de registros y análisis; una estación meteorológica, que permitirá evaluar comportamientos de los bienes en el microclima del propio Patio de los Leones, y un sistema de seguridad avanzado.