La tarifa eléctrica de último recurso (TUR), la única que fija el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio y a la que pueden acogerse consumidores con una potencia contratada inferior a 10KW, no subirá en la revisión trimestral que tendrá lugar el próximo 1 de abril.
Para determinar la TUR, el Ministerio de Industria tiene en cuenta dos variables, los peajes de acceso y el término de energía. El primero de ellos financia los costes del sistema y otras partidas como las primas a las energías renovables o el déficit de tarifa, y se determina mediante orden ministerial.
El segundo componente para fijar esta tarifa, el término energía, se fija mediante subastas de electricidad en el mercado que se celebran cada tres meses bajo la supervisión del Operador del Mercado Ibérico de Energía-Polo Español (OMEL) entre las comercializadoras de último recurso (Subastas CESUR).
Ante el descenso experimentado por el término de energía registrado en la última subasta, principalmente por motivos estacionales, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio ha decidido elevar los peajes de acceso para financiar los costes del sistema y reducir el déficit de tarifa, sin que ello repercuta en la tarifa de la luz.
El Gobierno está firmemente comprometido con su objetivo de equilibrar los costes e ingresos del sistema eléctrico para asegurar su sostenibilidad en el medio y largo plazo.
Desde la liberalización del sector puesta en marcha el 1 de julio de 2009, existe sólo un tipo de tarifa: la TUR, a la que tienen derecho los consumidores con una potencia contratada inferior a 10 kW. Actualmente, en torno a 17 millones de clientes tienen contratada este tipo de tarifa.
Además, el Gobierno creó el Bono Social, por el que se mantiene la tarifa de la luz congelada en el precio de 2009 para los consumidores más vulnerables. Hay en torno a 3 millones de clientes acogidos al bono social. Pueden acogerse al bono social los consumidores con una potencia contratada inferior a 3 kW en su primera vivienda, los pensionistas que perciban pensiones mínimas, las familias numerosas y las familias que tengan todos sus miembros en situación de desempleo.
El resto de consumidores contrata su suministro eléctrico en el mercado.
Tarifas de gas natural
Por otra parte, el próximo 1 de abril se actualizan también los dos tipos de tarifas de último recurso (TUR) que existen en gas natural.
Al igual que en la electricidad, la estructura de precios del gas está determinada por el valor de los peajes de acceso destinados a financiar las infraestructuras, y por el coste de la energía, que se determina mediante una fórmula que emplea los precios obtenidos en las subastas de gas y las cotizaciones internacionales del crudo Brent y de los mercados de futuros del gas.
De cara al próximo trimestre, el Gobierno va a congelar los peajes de acceso de forma que se trasladará únicamente al recibo la parte de energía de la tarifa.
Como consecuencia del incremento de los precios del gas, que se han encarecido un 10,65%, la TUR 1 (consumos de agua caliente y cocina) subirá un 3,3%, lo que supone un incremento medio mensual de 0,57 euros.
La TUR 2, que emplean los clientes que además usen el gas natural para calefacción, aumentará un 4,3%, (TUR 2) a partir de abril, lo que representa un incremento medio mensual de 2,31 euros.
El aumento medio de ambas tarifas se sitúa en un 4,1%, lo que representa un incremento medio mensual de 1,44 euros.
Actualmente, en el sistema gasista hay un total de 7,3 millones de clientes que pueden acogerse a la TUR, de los que 3 millones están acogidos a esta tarifa (1,8 millones a la TUR1 y 1,2 millones a la TUR2) mientras que 4,3 millones de suministran a un precio no regulado.