El trabajo “Unidades de Gestión Clínica en Atención Primaria. Calidad y Eficiencia como motor del cambio” presentado por el Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA) ha sido seleccionado como uno de los dos trabajos finalistas de la novena edición de los premios Profesor Barea a la Gestión y Evaluación de Costes Sanitarios en la categoría de “Los Centros Sanitarios como Empresa de Servicios: Gestión Global”.
En este trabajo se reflejan los resultados del pilotaje de las cinco unidades de Gestión clínica constituidas en el año 2009 en Atención Primaria así como los sistemas de evaluación diseñados por el Servicio de Salud para valorar el trabajo de las diferentes unidades de gestión clínica.
Los premios Profesor Barea, que concede anualmente la Fundación Signo, tratan de servir de reconocimiento a las buenas prácticas en la mejora de la gestión y evaluación de costes sanitarios. La Fundación Signo tienen entre sus objetivos la promoción y financiación de propuestas encaminadas a mejorar la gestión y evaluación de costes sanitarios que a ser posible impliquen una actividad interhospitalaria, multicomunitaria y multidisciplinaria.
El jurado que seleccionó el proyecto presentado por el SESPA estuvo integrado por Margarita Alfonsel, Secretaria General de la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN); la exministra de Sanidad, Ángeles Amador; Fernando Lamata, Consejero de Salud y Bienestar Social de Castilla-La Mancha; el jurista Gregorio Peces-Barba; el exministro de Sanidad José M. Romay; el Alcalde de Las Palmas, Jerónimo Saavedra; José M. Segovia de Arana, Académico de la Real Academia Nacional de Medicina y de Ciencias Morales y Políticas; y el Premio Príncipe de Asturias de las Ciencias Sociales, Juan Velarde, entre otras personas.
El Servicio de Salud del Principado de Asturias deberá presentar el trabajo seleccionado como finalista en el próximo día 26 mayo en la Universidad Carlos III de Madrid durante una jornada en la que se dará a conocer el nombre de los premiados.
El proyecto de Gestión Clínica que viene desarrollado el Servicio de Salud desde el año 2009 es una de las primeras experiencias en nuestro país que vincula y aúna, sin fisuras, la gestión clínica con la gestión de la calidad. Los resultados obtenidos tanto en lo que se refiere a eficiencia en el uso de los recursos como en mejora de la calidad del servicio abren una nueva línea de trabajo para la sostenibilidad del sistema sanitario público.
El objetivo general del proyecto es mejorar la eficacia, eficiencia, calidad y sostenibilidad del sistema sanitario, impulsando un nuevo modelo organizativo centrado en el paciente y basado en la gestión clínica y en la gestión de la calidad.
Otros objetivos específicos del mismo son:
1. Promover un nuevo liderazgo directivo basado en el liderazgo profesional y de gestión que sea capaz de impulsar a los miembros del equipo hacia la búsqueda de la mejora continua, la eficacia y eficiencia de las intervenciones y que promueva cambios en la organización del trabajo basados en la calidad y el beneficio del paciente.
2. Establecer con claridad y precisión los resultados clínicos, económicos y de calidad esperados, mediante el desarrollo de un instrumento de mejora, el acuerdo de gestión clínica, que identifique la producción clínica y los costes a ella asociados, el nivel de calidad a alcanzar, el grado de autonomía de gestión, así como los incentivos asociados al cumplimiento del acuerdo y los mecanismos para asignarlos.
3. Desarrollar un sistema de información corporativo, accesible en tiempo real para los gestores y los profesionales, que dé soporte y permita una clara medición y evaluación del grado de cumplimiento del acuerdo de gestión clínica suscrito entre las partes y de los elementos de la práctica clínica susceptibles de mejora.
Las primeras experiencias de Gestión Clínica en Atención Primaria puestas en marcha en Asturias han sido un éxito desde el punto de vista de la mejora en la calidad de la prestación de los servicios, el aumento en la seguridad de los pacientes, la satisfacción de los usuarios y el uso eficiente de los recursos públicos.
La evaluación de los cinco centros pilotos que echaron a andar en 2009 pone de manifiesto que cuando los profesionales se implican más activamente en la gestión de recursos, todas las partes resultan beneficiadas. Los pacientes porque reciben mejores prestaciones de salud, de más calidad y más seguras; los profesionales porque consiguen una mayor autonomía en la gestión de su trabajo, mejor relación con sus pacientes y más satisfacción por los logros obtenidos, y el propio Servicio de Salud porque se obtiene una mejor utilización de los recursos disponibles, lo que contribuye a la sostenibilidad del sistema, además de poder hacer una mejor planificación.