- Dos de ellos eran los encargados de conseguir los pasaportes falsos en Senegal y el resto los utilizaron para hacerse pasar por menores. Se les considera presuntos autores de un delito de Falsedad Documental. Fueron incautado SEIS pasaportes falsos.
- Todos se encontraban en situación de estancia irregular en España.
Oviedo, 15 de diciembre del 2011
A principios de febrero de este año, el Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Asturias en cooperación la Fiscalía de Menores de Oviedo, comenzó una investigación al detectarse la falsedad de un pasaporte presentado por un ciudadano de nacionalidad senegalesa, que pretendía acogerse a los beneficios previstos en la Ley para los menores extranjeros que se encuentran en España en situación de riesgo o desamparo.
A raíz de la detección del primer pasaporte falsificado en febrero de este año, se procedió a analizar los documentos de identidad presentados por menores tutelados por el Principado que no fueron recibidos por la vía ordinaria, es decir, que no fueron expedidos por su Consulado a petición de la Consejería, que en definitiva la representante legal de estos menores.
Este estudio pormenorizado de los documentos tenía como fin verificar su autenticidad y en el caso de que se detectaran alteraciones, informar inmediatamente a la Entidad Pública que tutela a los menores en situación de riesgo o desamparo y a la propia Fiscalía.
La investigación llevada a cabo por el Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Asturias y por la Fiscalía de Menores, determinó que dos individuos de nacionalidad senegalesa habían organizado una trama, que consistía en conseguir en Senegal la documentación falsa y posteriormente proporcionársela a jóvenes de su misma nacionalidad para que se hicieran pasar por menores extranjeros en situación de desamparo.
De esta manera, además de tener garantizadas las necesidades de ropa, comida y educación, estaban en disposición de conseguir un permiso de residencia, e incluso, cuando cumplieran la mayoría de edad, podrían tener una autorización para trabajar legalmente en España. Cinco de estos jóvenes han sido detenidos.
Uno de los casos sobre los que recayó la investigación lo protagonizó un ciudadano senegalés indocumentado, que dijo ser menor de edad.
Este joven se personó en las dependencias de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Oviedo manifestando que era menor de edad y que se encontraba solo en España en situación de desamparo, por lo que fue ingresado en la Unidad de Primera Acogida (UPA), dependiente de la Consejería de Bienestar Social y Vivienda.
Posteriormente, se recibió un decreto proveniente de la Fiscalía de Menores de Oviedo que en base a una prueba radiológica realizada sobre su antebrazo, se certificaba que este individuo era mayor de edad y que por lo tanto no podía estar ingresado en un Centro de Acogida de menores. Fue detenido y se le abrió un expediente administrativo para su expulsión por estancia irregular en España.
Meses después el mismo joven compareció nuevamente en la Comisaría de Oviedo, solicitando ser ingresado en el Centro Materno Infantil de esta ciudad, acreditando su minoría de edad mediante la exhibición de un pasaporte de la República de Senegal.
Tras el estudio técnico pericial realizado por los especialistas en Documentoscopia, adscritos a la Brigada Provincial de Policía Científica de esta Jefatura, se constató la falsedad de dicho documento por lo que se procedió a la detención de este individuo de 28 años de edad, por un delito de Falsedad Documental.