Los Picos de Europa, uno de los grandes tesoros naturales de Asturias, se prepara para un nuevo impulso en su conservación. El Principado recibirá 1.716.000 euros entre este año y el próximo para acometer una ambiciosa batería de actuaciones que mejorarán los ecosistemas de alta montaña, reforzarán las infraestructuras ganaderas y contribuirán a la lucha contra incendios forestales.
La inversión se canalizará a través de un convenio de colaboración entre el Gobierno del Principado, el Organismo Autónomo de Parques Nacionales y los ejecutivos autonómicos de Cantabria y Castilla y León, que comparten con Asturias la gestión del Parque Nacional de los Picos de Europa. Los fondos, procedentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, se distribuirán en dos tramos: 1,25 millones en 2025 y 466.000 euros en 2026.
Restauración ecológica, prevención y apoyo al pastoreo
El grueso de las actuaciones se concentrará en el entorno de los emblemáticos lagos Enol y Ercina, dos joyas paisajísticas del Parque Nacional, que verán restaurados sus humedales de alta montaña, clave para preservar la biodiversidad de anfibios, aves acuáticas y especies vegetales endémicas. Estas zonas húmedas actúan como reguladores del ciclo hídrico y son esenciales para mitigar los efectos del cambio climático en entornos frágiles.
Otro eje importante será el desbroce de matorral, una acción prioritaria tanto para prevenir incendios forestales como para mejorar el aprovechamiento ganadero. En un contexto de pérdida progresiva de superficie de pasto por la expansión del matorral, estas labores permitirán recuperar praderas, mejorar la biodiversidad y facilitar la labor de los pastores que mantienen viva la ganadería extensiva en la zona.
Además, se contemplan mejoras en infraestructuras ganaderas como bebederos, pasos canadienses o cercados móviles, así como la modernización de sistemas de saneamiento que contribuirán a mantener la calidad del agua en el entorno de uso ganadero y turístico.
Un modelo de conservación compartida
Este convenio refuerza la gestión coordinada entre comunidades autónomas en un parque nacional que trasciende límites territoriales y que es símbolo de identidad, biodiversidad y cultura para todo el norte de España. Las inversiones combinan ecología, prevención y desarrollo rural, apostando por un modelo de gestión sostenible que protege el entorno sin renunciar a la actividad humana que le da vida.
Con esta iniciativa, Asturias afianza su compromiso con la conservación activa de sus espacios naturales y con la búsqueda de soluciones que integren a los ganaderos, los visitantes y la naturaleza en un mismo camino de futuro.