Acuerdo clave para el futuro del medio rural: Banco de Tierras y Reader colaborarán en la difusión de programas para jóvenes agricultores y modernización de explotaciones
El campo asturiano se enfrenta a uno de sus mayores retos: el relevo generacional. Para afrontarlo con decisión, el Banco de Tierras de Asturias y la Red Asturiana de Desarrollo Rural (Reader) han sellado esta mañana un acuerdo de colaboración que refuerza el compromiso común por revitalizar el sector agrario, fomentar la cesión de explotaciones y acercar a los jóvenes al mundo rural con propuestas modernas, sostenibles y viables.
El protocolo fue firmado por el gerente de la Comisión Regional del Banco de Tierras, José Ramón Feito, y el presidente de Reader, Belarmino Fernández, en un acto que pone en marcha una hoja de ruta compartida durante los próximos cuatro años.
Relevo generacional y modernización del campo asturiano
El objetivo del convenio es claro: impulsar la continuidad del sector agrario asturiano a través de la modernización y la sucesión planificada de explotaciones. Para ello, ambas entidades se comprometen a organizar de manera conjunta foros, talleres, seminarios y charlas informativas, dirigidos tanto a jóvenes interesados en incorporarse al campo como a titulares de explotaciones en busca de relevo.
Además, se desplegará una estrategia de comunicación en los once grupos de desarrollo rural que integran la red asturiana, con el fin de acercar a los vecinos y vecinas de las zonas rurales los programas estrella del Banco de Tierras, como:
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Permutas de fincas rústicas, para facilitar la reorganización del territorio agrícola.
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Bolsa de arrendamientos, que pone en contacto a propietarios de tierras con personas interesadas en su uso agrícola o ganadero.
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Línea de ayudas para la cooperación en la sucesión de explotaciones, que permitirá subvenciones de hasta 65.000 euros para favorecer el relevo mediante el uso y/o cesión de fincas y explotaciones.
Material divulgativo y formación para dinamizar el territorio
Para garantizar el éxito de la campaña, el Banco de Tierras suministrará a los grupos de desarrollo material divulgativo, folletos, recursos informativos y formación técnica sobre sus programas y ayudas. El propósito es que cada grupo se convierta en un altavoz eficaz dentro de su territorio, facilitando el acceso a oportunidades reales a quienes desean quedarse —o regresar— al medio rural.
El convenio no implica financiación directa por parte de las entidades firmantes, pero sí un firme compromiso institucional y operativo por parte de ambas, consolidando una alianza estratégica en favor del desarrollo rural sostenible.
Un pacto por el futuro de los pueblos
Este acuerdo cobra aún más relevancia en un contexto en el que el medio rural asturiano lucha contra el envejecimiento poblacional, la falta de relevo en las actividades agrícolas y ganaderas, y el abandono de tierras fértiles que podrían volver a producir.
Desde Reader destacan que “conectar generaciones en el campo es esencial para mantener viva la identidad rural”, mientras que desde el Banco de Tierras insisten en que “no basta con tener tierras disponibles, hay que crear las condiciones para que sean aprovechadas por nuevas manos”.
El nuevo protocolo marca un paso firme hacia ese objetivo: facilitar el acceso, eliminar barreras, informar y acompañar a quienes quieren emprender un proyecto agrícola o ganadero con futuro en Asturias.
Próximamente se anunciarán fechas y lugares de las primeras charlas y talleres en toda la región.
Pie de foto: El gerente de la Comisión Regional del Banco de Tierras, José Ramón Feito, y el presidente de la Red Asturiana de Desarrollo Rural (Reader), Belarmino Fernández.