El Clúster TIC de Asturias impulsa un sistema colaborativo y no presencial que permite a estudiantes de siete centros formativos realizar prácticas en empresas del sector sin salir del aula

Lo que comenzó como un problema estructural en el nuevo modelo de FP Dual en Asturias, se ha convertido en una oportunidad de transformación educativa pionera en España. Esta semana, 190 alumnos de ciclos formativos de informática han comenzado sus prácticas en empresa gracias a un modelo disruptivo propuesto por el Clúster TIC de Asturias, que rompe moldes: prácticas no presenciales y sin vinculación exclusiva a una sola empresa.

Una solución innovadora a un problema real

A inicios del curso 2024-2025, los centros de FP asturianos detectaron una dificultad grave: no había suficientes plazas de prácticas para garantizar que todo el alumnado de primero pudiera acceder a la formación en empresas. Esto ponía en riesgo la equidad del sistema y podía provocar desequilibrios formativos entre estudiantes.

En noviembre, el Clúster TIC contactó con la Dirección General de Planificación de Formación Profesional del Principado y propuso una alternativa audaz: permitir prácticas no presenciales en sectores como el tecnológico, donde el trabajo en remoto es una norma habitual.

Tras meses de coordinación con las consejerías de Ciencia, Empresas, Formación y Empleo, y Educación, el modelo fue aprobado y se implementó en tiempo récord.

Siete centros, 31 empresas y una experiencia compartida

El proyecto involucra a siete centros educativos:

• IES Doctor Fleming y Monte Naranco (Oviedo)
• IES Bernaldo de Quirós (Mieres)
• IES Juan José Calvo Miguel (Sotrondio)
• CIFP de Avilés
• CIFP Sector Industrial y de Servicios (Gijón)
• Colegio Sagrada Familia-El Pilar (Pola de Lena)

Los estudiantes cursan los ciclos de Desarrollo de Aplicaciones Web, Multiplataforma y Administración de Sistemas Informáticos en Red, y han iniciado sus prácticas el 19 de marzo.

Gracias al trabajo conjunto de 31 empresas tecnológicas asturianas, desde startups hasta grandes corporaciones, cada alumno podrá participar en proyectos reales, entornos colaborativos y retos tecnológicos diseñados ad hoc para su nivel de formación.

Formación técnica y competencias clave

Las prácticas, coordinadas por el Clúster TIC, no solo permiten a los alumnos conocer el día a día de una empresa, sino que también incluyen formación en competencias transversales (trabajo en equipo, comunicación, resolución de problemas...), muy valoradas por los departamentos de recursos humanos del sector.

Cada empresa implicada ha diseñado retos específicos para que los estudiantes los desarrollen en equipos multidisciplinares, con un enfoque práctico y realista.

Una colaboración público-privada ejemplar

Este modelo demuestra que cuando las instituciones educativas, la administración y las empresas colaboran, se pueden crear soluciones reales para los desafíos del presente. El sector TIC asturiano, en pleno crecimiento y con una alta demanda de talento, da así un paso al frente para formar, atraer y retener jóvenes profesionales desde la raíz del sistema educativo.

“Gracias a esta fórmula, ningún estudiante se ha quedado sin prácticas, y además, han accedido a una experiencia más rica y plural que en el modelo tradicional”, destacan desde el Clúster TIC.

Una FP del siglo XXI, hecha en Asturias

Con esta iniciativa, Asturias se sitúa a la vanguardia de la innovación educativa en FP Dual, apostando por la flexibilidad, la tecnología y la colaboración como herramientas para formar a los profesionales del futuro.

Un modelo que podría servir de referencia para otros sectores… y para otras comunidades.