Los veterinarios advierten que la nueva normativa puede causar sufrimiento innecesario y complicaciones graves en los animales de compañía

Las mascotas son parte de nuestras familias, y su salud y bienestar dependen de una atención veterinaria eficaz y sin trabas burocráticas. Sin embargo, la entrada en vigor del Real Decreto 666/2023 está poniendo en riesgo su cuidado al imponer graves restricciones en la prescripción y dispensación de antibióticos, lo que podría provocar sufrimiento innecesario e incluso la muerte de muchos animales.

Desde el pasado 2 de enero, la normativa obliga a los veterinarios a prescribir exclusivamente antibióticos de categoría A como primera opción, independientemente de la gravedad de la infección, retrasando así tratamientos más eficaces y poniendo en peligro a los animales enfermos. Además, estos medicamentos no podrán ser facilitados por las clínicas, sino que deberán adquirirse en farmacias, lo que añade demoras y complica el acceso a los tratamientos.

La veterinaria Ana Bances, vicepresidenta de la Asociación Empresarial de Profesionales Veterinarios del Principado de Asturias (Aemvet), alerta sobre las consecuencias de esta normativa:
“Nos obligan a prescribir medicamentos que sabemos que serán insuficientes, esperando a que el animal no mejore para poder usar uno más fuerte. Esto implica días de sufrimiento y, en muchos casos, un deterioro irreversible de su salud”.

Mascotas en riesgo: el peligro de retrasar el tratamiento adecuado

Cuando un perro o un gato enferman, el tiempo es clave. Un diagnóstico acertado y un tratamiento inmediato pueden marcar la diferencia entre una recuperación rápida o una enfermedad prolongada y peligrosa. Sin embargo, la nueva ley impone barreras burocráticas que ralentizan el proceso:

Se eliminan tratamientos inmediatos: los veterinarios deben esperar a que un antibiótico de baja eficacia falle antes de recetar uno más fuerte.
Se aumenta el riesgo de complicaciones: enfermedades que se curarían en pocos días pueden agravarse por la falta de tratamiento adecuado.
Los dueños deben acudir a la farmacia: el tiempo de espera para conseguir los antibióticos puede ser demasiado largo en casos urgentes.

Los veterinarios insisten en que esta normativa choca directamente con la Ley de Bienestar Animal, que obliga a proteger a los animales de cualquier tipo de sufrimiento innecesario.

Movilización en Asturias: los veterinarios luchan por la salud de nuestras mascotas

La preocupación ha llevado al sector veterinario a convocar movilizaciones en toda España. En Asturias, la protesta se celebrará el domingo 23 de marzo a las 12:00 horas en la Plaza de la Escandalera de Oviedo.

Los profesionales han lanzado incluso una canción con un mensaje claro:
“La salud animal no se regula con esposas en las manos”.

Durante la manifestación exigirán:
✅ La modificación del decreto para que los veterinarios puedan decidir el mejor tratamiento para cada caso.
✅ La reducción del IVA veterinario, que actualmente es del 21% y encarece la atención de las mascotas.
✅ Protocolos claros y efectivos que garanticen la salud animal sin obstaculizar la labor veterinaria.

El problema no solo afecta a perros y gatos, sino también a animales exóticos y de granja, que en muchos casos requieren tratamientos urgentes para evitar epidemias o la propagación de enfermedades.

¿Qué dice el Gobierno? ¿Y qué defienden los veterinarios?

El Ministerio de Agricultura sostiene que estas restricciones son necesarias para frenar la resistencia a los antibióticos, un problema de salud pública a nivel global. No obstante, los veterinarios recuerdan que en medicina humana los médicos siguen teniendo plena autonomía para recetar los tratamientos adecuados en cada caso, algo que ellos también deberían poder hacer.

"No pedimos un uso indiscriminado de antibióticos, sino la posibilidad de tratar a los animales de la forma más eficaz y ética posible", insisten desde Aemvet.

Mientras en países como Francia y Alemania se han aplicado medidas más flexibles, en España las restricciones son especialmente rígidas, lo que ha generado una fuerte oposición del sector veterinario.

Tu mascota te necesita: infórmate y actúa

Si tienes un perro, un gato o cualquier otra mascota, esta normativa puede afectarle en cualquier momento. Desde una simple infección urinaria hasta una enfermedad más grave, la limitación en los antibióticos puede significar un mayor sufrimiento y una recuperación más lenta.

Si estás preocupado por esta situación, puedes sumarte a la movilización del 23 de marzo o informarte a través de asociaciones veterinarias.
Comparte esta información con otros dueños de mascotas para que conozcan cómo esta ley puede afectar a la salud de sus animales.

Los veterinarios han lanzado un mensaje claro: "Nosotros alzamos la voz, pero quienes lo pagarán son los animales". Ahora, depende de todos velar por su bienestar y exigir una regulación que garantice su derecho a una atención médica digna y eficaz.