El miedo se ha instalado en Navelgas, Tineo. Lo que antes era solo un problema para los ganaderos, ahora preocupa a toda la comunidad: los lobos han matado más de 20 ovejas a pocos metros de un colegio y un centro de salud, desatando el pánico entre vecinos y padres.
Los ataques nocturnos ya no son una novedad, pero lo alarmante es que cada vez ocurren más cerca de zonas habitadas. La Unión Rural Asturiana (URA) ha dado la voz de alarma: “Los lobos han perdido el miedo a los humanos”, advierten. Sus aullidos resuenan cada noche en el pueblo, y algunos vecinos aseguran haberlos visto merodeando a plena luz del día.
Ganaderos desbordados: “No podemos protegernos”
El último ataque ha dejado una imagen desoladora: ovejas devoradas, otras agonizando en el prado y la sensación de que la situación se está descontrolando.
“Si se acercan tanto, ¿qué les impide atacar a una persona?”, se pregunta una madre que cada mañana lleva a su hijo al colegio. La cercanía de los depredadores a zonas habitadas ha hecho saltar todas las alarmas.
Los ganaderos de la zona denuncian que las ayudas para proteger al ganado son insuficientes. Pese a las subvenciones para vallas eléctricas y mastines, los ataques siguen aumentando. “Los lobos ya no huyen. Nos observan desde los caminos, están cada vez más confiados”, relata un vecino.
Las cifras del miedo: los ataques del lobo se disparan en Asturias
El caso de Tineo no es aislado. En 2024, los ataques de lobo al ganado en Asturias aumentaron un 19%, según datos de la Consejería de Medio Rural. Más de 3.000 casos han sido registrados en el último año, con indemnizaciones que superan el millón de euros.
El problema, aseguran los expertos, es que la protección del lobo ha cambiado el equilibrio natural. Desde que el Gobierno lo incluyó en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (Lespre), los controles de población han desaparecido.
¿Hasta dónde llegarán?
El Ayuntamiento de Tineo ya ha solicitado una reunión urgente con la Dirección General de Planificación Agraria, cuyo responsable es originario de Navelgas. Los vecinos exigen medidas antes de que ocurra una tragedia.
"No queremos que la siguiente víctima sea un niño", advierte una madre. La pregunta ya no es si volverán a atacar, sino hasta dónde llegarán.