Lo que debía ser una simple discusión por un coche mal aparcado terminó en un suceso impactante que ha dejado a todo Oviedo con la boca abierta. Un hombre de 77 años se encuentra ingresado en estado grave en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) tras un altercado en un garaje del barrio de El Cristo que escaló de forma inesperada hasta la violencia física.

Todo ocurrió en la tarde del viernes en la calle Ángel Muñiz Toca. El anciano recriminó enérgicamente a un agente inmobiliario de 56 años por haber estacionado mal su vehículo en el aparcamiento del edificio. El tono de la discusión subió de nivel rápidamente, hasta que ambos acabaron intercambiando bofetadas. Sin embargo, un solo golpe bastó para que la situación diera un giro dramático: el septuagenario cayó de espaldas, golpeándose violentamente la cabeza contra el suelo.

El impacto fue brutal. Testigos relatan que el anciano quedó inconsciente de inmediato y comenzó a mostrar signos de desorientación. El agresor, visiblemente alterado, intentó asistirlo mientras los presentes alertaban al 112. Una UVI móvil se desplazó de urgencia al lugar y trasladó a la víctima al HUCA, donde tuvo que ser intervenido quirúrgicamente debido a la gravedad de sus lesiones.

Un detenido y una investigación en marcha

La Policía Local de Oviedo acudió rápidamente al lugar de los hechos y detuvo al presunto agresor, quien reconoció haber golpeado al anciano pero alegó que solo había respondido a una agresión previa. El detenido, un agente inmobiliario que había accedido al edificio para enseñar un piso a un cliente, fue trasladado a la Comisaría de la Policía Nacional en Buenavista, donde se le investiga por un delito de lesiones graves.

Por ahora, el tratamiento penal que recibirá dependerá de la evolución del herido, quien permanece en estado reservado tras la operación.

Un episodio de violencia absurda en un Oviedo que ve crecer la criminalidad

Más allá del suceso, lo ocurrido en este garaje refleja una realidad preocupante: los conflictos cotidianos que terminan en agresiones físicas. En Asturias, los delitos graves y menos graves de lesiones han aumentado un 0,7% en el último año, y Oviedo ha visto un alarmante incremento del 67% en los robos con violencia e intimidación.

Las autoridades han hecho un llamamiento a la calma y a la resolución pacífica de conflictos, recordando que ningún desacuerdo —por absurdo que parezca— debería terminar con alguien en una sala de urgencias.

Mientras tanto, el barrio de El Cristo sigue en estado de shock. Nadie podía imaginar que una discusión por un aparcamiento acabaría de forma tan dramática.