Más de 44.700 personas se han beneficiado del plan de emprendimiento del Principado, que prepara un nuevo programa hasta 2027
Asturias pisa el acelerador del emprendimiento. Con una inversión de 95 millones de euros en los últimos cuatro años, el Principado ha impulsado la creación y consolidación de miles de empresas, favoreciendo la recuperación del tejido empresarial tras la pandemia y reduciendo el miedo a emprender. Así lo refleja el balance del Plan de Fomento del Emprendimiento 2020-2023, elaborado por la Dirección General de Empresas, Pymes y Emprendedores, que ya trabaja en una nueva estrategia hasta 2027.
Un impulso sin precedentes para el ecosistema emprendedor
Los datos son contundentes: más de 44.700 personas han recibido apoyo en estos cuatro años, con un total de 40.433 ayudas extraordinarias –incluyendo los fondos Covid– que han movilizado 85,2 millones de euros. Además, los programas ordinarios y el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR) han inyectado casi 10 millones adicionales en 4.346 subvenciones.
La respuesta del ecosistema empresarial no se ha hecho esperar. La creación de empresas ha crecido con fuerza, superando los niveles prepandemia. Solo en 2023 se fundaron 1.298 nuevas compañías, cifra que ascendió a 1.502 en 2024, consolidando una tendencia al alza en el tejido productivo regional.
Empresas más fuertes y menos abandonos
El plan no solo ha fomentado la creación de empresas, sino que ha mejorado su consolidación. La tasa de supervivencia empresarial en Asturias es del 7,8%, superando la media nacional del 6,8%. Además, la tasa de abandono es una de las más bajas de España: solo un 1,8% frente al 3,2% nacional.
En cuanto a los sectores más dinámicos, el comercio al por mayor y menor, el sector inmobiliario, las finanzas, los seguros y la construcción lideran la lista de nuevas iniciativas empresariales en la región.
La red de apoyo al emprendedor, clave del éxito
El éxito del programa ha sido posible gracias a la colaboración con los principales agentes del ecosistema emprendedor asturiano. Organismos como Valnalón, la Asociación de Centros de Empresas del Principado de Asturias (Aceppa), el Centro Europeo de Empresas e Innovación (CEEI), la Agencia Sekuens, la Asociación de Jóvenes Empresarios de Asturias (AJE) y la Universidad de Oviedo han desempeñado un papel clave en la formación y el asesoramiento.
Solo Aceppa organizó 600 actividades de sensibilización con más de 18.000 participantes, mientras que Valnalón formó a 41.000 personas en 850 centros educativos. Los centros de Aceppa también asesoraron la creación de más de 1.600 empresas y gestionaron cerca de 39.000 consultas. Por su parte, el CEEI impulsó 74 startups tecnológicas y 25 spin-offs.
El perfil del emprendedor asturiano: joven, formado y con visión de futuro
El estudio revela que el emprendedor medio en Asturias es un hombre de entre 25 y 44 años con estudios universitarios. Si bien la principal motivación sigue siendo la búsqueda de empleo, gana terreno el deseo de "marcar la diferencia" con proyectos innovadores y de impacto.
Además, se ha observado un descenso en el miedo a emprender y un aumento de los conocimientos sobre gestión empresarial, lo que refuerza la confianza en la viabilidad de los nuevos negocios.
El futuro: un nuevo plan hasta 2027 para potenciar la innovación y la digitalización
El Principado ya trabaja en un nuevo programa que se extenderá hasta 2027, con el objetivo de seguir fomentando vocaciones emprendedoras y adaptarse a las tendencias emergentes del sector. La evaluación del plan actual, junto con las aportaciones de los emprendedores y expertos, servirá de base para definir las prioridades de esta nueva estrategia.
“Más de la mitad de las empresas creadas en los últimos años ya comercializan sus productos fuera del Principado, lo que es un indicador muy positivo. Además, un 50% prevé aumentar sus ventas este año”, destacó el director general de Empresas, Ignacio Iglesias.
Con este nuevo impulso, Asturias se posiciona como un referente en el apoyo al emprendimiento, demostrando que la innovación y la iniciativa empresarial son motores clave para el crecimiento económico de la región.