El Centro Niemeyer acoge una muestra única del icónico artista Eduardo Arroyo, con obras procedentes del Reina Sofía, el IVAM y el MURAM, que estarán disponibles del 7 de febrero al 4 de mayo.

La figura de Eduardo Arroyo (1937-2018), una de las voces más influyentes del arte contemporáneo español, vuelve a brillar en Asturias con la exposición "Una biografía pintada", que abrirá sus puertas en la Cúpula del Centro Niemeyer del 7 de febrero al 4 de mayo. Comisariada por Marisa Oropesa, la muestra reúne obras clave cedidas por el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (MNCARS), el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) y el Museo Regional de Arte Moderno de Cartagena (MURAM).

El impacto de "Los cuatro dictadores"
Uno de los grandes protagonistas de la exposición es el impactante políptico Los cuatro dictadores (1963), procedente del MNCARS. La obra representa de manera grotesca y crítica a Franco, Salazar, Hitler y Mussolini como figuras deformadas, adornadas con elementos de su iconografía dictatorial y referencias a tragedias históricas como los campos de concentración y la represión franquista. Presentado en la III Bienal de París, este políptico marcó un antes y un después en la carrera de Arroyo, vetado en España tras su exhibición.

El compromiso social y el homenaje a Tina
La muestra también dedica un espacio destacado a Constantina Pérez Martínez, conocida como Tina, una mujer represaliada por las protestas mineras asturianas y símbolo de resistencia frente a la dictadura franquista. Tina inspiró varias obras de Arroyo, como Tina Tondue por la pocile IV y La moglie del minatore Pérez Martínez, Constantina, detta Tina, ambas incluidas en la exposición.

El retrato de Tina, desafiante y en primer plano, refleja la lucha por los derechos laborales y sociales en Asturias. "El rostro de Tina es una declaración de fuerza y dignidad frente a la opresión", explica la comisaria Marisa Oropesa, destacando la influencia de Joan Miró en la estética de estas obras.

La tragedia de Fouquières-lès-Lens
Otra obra que no deja indiferente es El día que conocí a mi primer amor (1971), inspirada en el joven minero Jean Pierre Antinori, fallecido junto a 16 compañeros en una explosión minera en Francia. Arroyo utiliza esta tragedia para denunciar las condiciones laborales y la falta de justicia social, reafirmando su compromiso con las causas populares.

Un recorrido por la crítica política y social
La exposición incluye un total de 15 obras del MNCARS, el IVAM y el MURAM, además de piezas emblemáticas como Robinson Crusoe (1966), Madrid-París-Madrid (1984) y Oui oui, nous rentrerons dans le Marché Commun (1971). Estas creaciones capturan la visión crítica de Arroyo hacia la realidad política y social de su tiempo, con un estilo que combina elementos del arte pop y la figuración crítica.

Horarios y acceso
"Una biografía pintada" estará abierta al público en el Centro Niemeyer desde el 7 de febrero hasta el 4 de mayo. Las entradas estarán disponibles en la web oficial del centro y en taquilla. Esta es una oportunidad única para conocer de cerca el legado de un artista que marcó una época y cuya obra sigue siendo un espejo de las luchas y contradicciones de la sociedad contemporánea.

Pie de foto: "Los cuatro dictadores" (Eduardo Arroyo)