Del 7 de febrero al 4 de mayo, la Cúpula del Centro Niemeyer acogerá más de sesenta obras del icónico artista español Eduardo Arroyo, explorando su legado como referente del arte contemporáneo.

El Centro Niemeyer de Avilés se prepara para ser el escenario de una de las exposiciones más esperadas del año: “Una biografía pintada”, dedicada al pintor, escritor y escenógrafo Eduardo Arroyo (1937-2018). Bajo el comisariado de Marisa Oropesa, esta muestra reúne más de sesenta obras procedentes de destacadas colecciones, incluyendo el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, la Fundación Azcona y la Colección Julián Castilla.

Un viaje por más de medio siglo de arte y compromiso

Eduardo Arroyo, considerado una de las figuras clave del arte contemporáneo español, definió su obra como una autobiografía a través de la pintura. La exposición abarca desde los años sesenta hasta el final de su vida, mostrando la evolución de un lenguaje artístico que mezcla denuncia, ironía, literatura y reinterpretaciones de grandes maestros como Van Gogh o De Chirico.

Entre las piezas destacadas se encuentran sus litografías dedicadas a Tina, Constantina Pérez Martínez, una figura clave en las protestas mineras asturianas, que se reflejan en obras como “La femme du mineur Pérez Martínez” y “La moglie del minatore Pérez Martínez, Constantina detta Tina, rapata della polizia”. Estas creaciones subrayan el compromiso social y político que marcó gran parte de su trayectoria.

Arte con identidad española y universal

El folclore español ocupa un lugar central en la obra de Arroyo, pero reinterpretado con nuevos significados que evolucionaron a lo largo de los años. Al mismo tiempo, la literatura se erige como un elemento recurrente en su iconografía, mezclando cuentos populares con clásicos universales como los escritos de Oscar Wilde. La muestra ofrece una oportunidad única para adentrarse en este universo creativo que conecta lo personal con lo político y lo local con lo universal.

Declaraciones del artista y la comisaria

“Me preocupa la cultura y el entorno, me preocupa todo, las cosas y la vida, y me preocupa mucho el arte y la pintura, y me parece importante porque mi patria es la pintura”, declaró Arroyo en vida, sintetizando el profundo vínculo entre su arte y su existencia. Según Marisa Oropesa, comisaria de la exposición, “conoceremos algunos de los temas que acompañaron siempre a este madrileño y que le convirtieron en un referente internacional. Su obra pasó de la denuncia explícita contra la dictadura franquista a un lenguaje irónico, sutil e íntimo”.

Una cita imprescindible en Avilés

Esta exposición no solo rinde homenaje a un artista fundamental, sino que también invita al público a reflexionar sobre su legado y su capacidad para conectar el arte con los grandes temas de su tiempo. La Cúpula del Centro Niemeyer, un espacio único que realza la experiencia visual, será el marco perfecto para esta retrospectiva que promete ser uno de los eventos culturales más destacados de 2025.

Horarios y acceso

“Una biografía pintada” estará abierta al público desde el 7 de febrero hasta el 4 de mayo de 2025, con horarios de visita adaptados para facilitar el acceso a todos los interesados. La entrada incluye la posibilidad de explorar el resto de las instalaciones del Centro Niemeyer, consolidando a este espacio como un referente cultural de Asturias.

No pierdas la oportunidad de sumergirte en el universo de Eduardo Arroyo y descubrir cómo la pintura puede ser mucho más que arte: una verdadera biografía de vida.

Pie de foto: "El dorado" (Arroyo)