Renfe ha restablecido la circulación de los trenes de alta velocidad después de una avería informática que dejó inoperativas las unidades Talgo Avril (serie 106) el 1 de enero de 2025. La incidencia afectó a más de 14.000 pasajeros en los corredores Madrid-Galicia/Asturias, Madrid-Zaragoza/Barcelona y Madrid-Levante.

El problema, relacionado con la comunicación entre el sistema de control y los cargadores de baterías, impidió la carga adecuada de las mismas, esencial para el funcionamiento de los pantógrafos que conectan los trenes con la catenaria. Este fallo, descrito por algunos como un "efecto 2025", provocó la suspensión de 28 servicios AVE y Avlo, afectando a miles de viajeros en una fecha de alta demanda. 

Desde las 4:40 horas del 2 de enero, los servicios han vuelto a la normalidad en los tres corredores afectados. Renfe implementó un plan operativo especial para reubicar a los pasajeros en otros trenes y, cuando no fue posible, organizó transporte alternativo por carretera. La compañía ha garantizado el viaje a todos los pasajeros afectados y ha desactivado el plan especial tras la resolución de la avería.

Este incidente se suma a una serie de desafíos que Renfe ha enfrentado con los trenes Avril de Talgo. La operadora ha reclamado compensaciones al fabricante por retrasos en la entrega y problemas técnicos de estas unidades. En diciembre de 2024, Renfe comenzó a ejecutar una sanción de 166 millones de euros a Talgo por el retraso en la entrega de los trenes de alta velocidad S-106.

Los trenes Talgo Avril, introducidos en mayo de 2024, destacan por su alta capacidad, eficiencia energética y diseño avanzado. Sin embargo, han enfrentado múltiples incidencias que han afectado su fiabilidad y la experiencia de los usuarios. Renfe y Talgo continúan trabajando conjuntamente para garantizar la operatividad y seguridad de estos trenes en el futuro.