La capital asturiana celebra un encuentro sin precedentes de los más destacados chefs del país, coincidiendo con el reconocimiento de la cultura sidrera asturiana como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y la tercera estrella Michelin para Casa Marcial.
En un día que quedará grabado en los anales de la gastronomía española, Oviedo, recientemente nombrada Capital Española de la Gastronomía 2024 fue el escenario de una cumbre sin precedentes que reunió a ocho de los chefs más laureados del país. Este encuentro coincidió con la celebración del reconocimiento de la cultura sidrera asturiana como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO y la concesión de la tercera estrella Michelin al restaurante Casa Marcial, dirigido por los hermanos Nacho y Esther Manzano .
El Auditorio Príncipe Felipe de Oviedo acogió a figuras emblemáticas de la cocina española, entre ellos Ferran Adrià, José Andrés, Elena Arzak, Joan Roca, Pedro Subijana, Quique Dacosta, Hilario Arbelaitz y Martín Berasategui. Durante la gala, los chefs destacaron la importancia de la camaradería y la colaboración que han permitido posicionar a la gastronomía española entre las mejores del mundo. Martín Berasategui enfatizó la necesidad de mantener el nivel alcanzado, advirtiendo que "hay muchos países con ganas de quitarnos un trozo de esa tortilla de patatas que es el turismo gastronómico".
Ferran Adrià, por su parte, reflexionó sobre la evolución del reconocimiento culinario en España, recordando que cuando obtuvo su tercera estrella Michelin, apenas se mencionó en los medios nacionales. El chef asturiano José Andrés elogió la generosidad y la concordia en la profesión, compartiendo anécdotas personales que resaltan la humildad y accesibilidad de sus colegas.
La jornada también sirvió para abordar temas relevantes del sector, como la necesidad de mejorar las condiciones laborales en la hostelería, la promoción de la formación culinaria y el papel de la mujer en la cocina. Elena Arzak abogó por incrementar las becas y facilitar el acceso a estudios gastronómicos, mientras que Joan Roca subrayó la importancia de redefinir el concepto de éxito en la profesión, afirmando que "el éxito es ser feliz haciendo lo que te gusta".
La reciente concesión de la tercera estrella Michelin a Casa Marcial fue motivo de celebración durante el evento. Los hermanos Manzano recibieron numerosas muestras de cariño y felicitaciones de sus colegas. Martín Berasategui expresó su deseo de ver a Nacho Manzano "tocando el cielo" durante la ceremonia de entrega de las estrellas. José Andrés, visiblemente emocionado, interrumpió la gala para exclamar "¡Te quiero!" antes de fundirse en un abrazo con Nacho Manzano.
El alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, destacó que este encuentro es el "colofón" a las actividades de la capitalidad gastronómica, subrayando que "ahora ya saben en todo el mundo lo bien que se come aquí". Por su parte, la vicepresidenta del Principado, Gimena Llamedo, celebró que los chefs hayan desvelado que "el secreto es el compañerismo" y rindió homenaje a las guisanderas que han contribuido a que Asturias sea "un paraíso gastronómico".
Este encuentro en Oviedo no solo celebra los logros individuales de los chefs, sino que también refuerza la posición de la gastronomía española en el panorama mundial, destacando la importancia de la colaboración y el espíritu comunitario en el éxito colectivo.