El trabajo autónomo cierra noviembre con cifras récord, consolidándose como un pilar esencial para la economía del país. Según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) alcanzó 3.385.663 afiliados, marcando un aumento interanual de 41.961 autónomos. Este crecimiento, tres veces superior al registrado en 2023, refleja un dinamismo sin precedentes en el autoempleo, un segmento tradicionalmente afectado por la estacionalidad negativa de noviembre.

Un crecimiento que desafía la tendencia histórica

Noviembre, históricamente adverso para el empleo, sorprende con un incremento del 0,02% en el número de autónomos, en contraste con las caídas de años anteriores (-1.070 en 2023 y -2.801 en 2022). Estas cifras confirman el buen momento del autoempleo, impulsado por la regularización de falsos autónomos como asalariados y por un mayor protagonismo de sectores como las actividades profesionales, educación, transporte y construcción.

Sin embargo, la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE) advierte que este crecimiento debe ser respaldado por políticas públicas que garanticen estabilidad y condiciones justas para el colectivo. María José Landaburu, secretaria general de UATAE, destaca: “No podemos conformarnos con cifras récord si detrás hay autónomos enfrentando dificultades para llegar a fin de mes o acceder a una protección social adecuada. Es imprescindible consolidar este crecimiento con medidas que atiendan las necesidades reales del colectivo, especialmente en sectores vulnerables o emergentes”.

Las mujeres autónomas, protagonistas del cambio

El informe también subraya el creciente papel de las mujeres en el RETA. Aunque todavía enfrentan barreras significativas, como la brecha salarial y la falta de corresponsabilidad, su contribución es cada vez más decisiva. UATAE insta a implementar acciones específicas para reducir las desigualdades de género en el autoempleo, fomentando la igualdad y promoviendo el liderazgo femenino en la economía.

Desafíos y oportunidades para el futuro

A pesar del balance positivo, UATAE recuerda que la inestabilidad económica y la falta de protección social siguen siendo retos clave. “El aumento en el número de autónomos no debe verse como un dato aislado, sino como una oportunidad para reforzar el compromiso con quienes emprenden, crean empleo y contribuyen al progreso del país”, enfatiza Landaburu.

El descenso de autónomos en sectores tradicionales como el comercio y la hostelería ha sido compensado por el auge en otros ámbitos, reflejando la capacidad del colectivo para adaptarse a un mercado cambiante. No obstante, UATAE advierte que es crucial redoblar esfuerzos en apoyo al autoempleo para garantizar su sostenibilidad y fortalecer su papel en el desarrollo económico.

Una llamada a la acción

Con este récord histórico, UATAE insiste en la necesidad de medidas estructurales para consolidar el trabajo autónomo como una opción viable y atractiva. Desde políticas de protección social hasta incentivos específicos para sectores emergentes, el autoempleo debe recibir el reconocimiento y apoyo que merece. “Este crecimiento es un logro, pero también una responsabilidad compartida para garantizar que los autónomos puedan desarrollarse plenamente y seguir impulsando el futuro económico del país”, concluye Landaburu.