El nuevo informe de UNICEF pone de manifiesto cómo la emergencia climática, los cambios demográficos y la brecha tecnológica transformarán la vida de millones de niños y niñas para 2050, con un llamado urgente a la acción
En el marco del Día Mundial de la Infancia, UNICEF ha presentado un informe que vislumbra un panorama preocupante para los niños, niñas y adolescentes en un mundo marcado por la crisis climática, la desigualdad y el avance tecnológico. Según "El Estado Mundial de la Infancia 2024: el futuro de la infancia en un mundo cambiante", si no se toman medidas inmediatas, para mediados de siglo el número de menores afectados por olas de calor extremas e inundaciones podría multiplicarse por ocho.
Un futuro bajo amenaza climática
El informe advierte que, en la década de 2050-2059, la exposición de los niños a fenómenos climáticos extremos se disparará:
- Olas de calor extremas: ocho veces más niños afectados.
- Inundaciones fluviales extremas: tres veces más afectados.
- Incendios forestales extremos: el doble de niños expuestos.
En España, un ejemplo reciente de esta amenaza es la DANA que ha azotado la Comunidad Valenciana, dejando a 163.000 niños en municipios afectados. Gustavo Suárez-Pertierra, presidente de UNICEF España, subrayó:
"Los niños y niñas necesitan regresar a la escuela con seguridad y apoyo emocional tras el trauma vivido. Mientras se rehabilitan las escuelas, deben habilitarse espacios alternativos seguros para garantizar su bienestar y aprendizaje."
La desigualdad digital: un nuevo desafío
Aunque los avances tecnológicos ofrecen oportunidades, el informe señala una alarmante brecha digital. En 2024, el 95% de los habitantes de países de renta alta están conectados a internet, frente al 26% en países de renta baja. Esta desigualdad limita el acceso de millones de niños a herramientas educativas digitales y su capacidad para competir en un mercado laboral futuro.
"La tecnología debe diseñarse pensando en los niños, priorizando su seguridad y accesibilidad, mientras se reducen las barreras que perpetúan la exclusión," destacó el informe.
Cambios demográficos: una infancia en declive
Para 2050, África subsahariana y el sur de Asia concentrarán la mayor población infantil del mundo, mientras que regiones como Europa Occidental verán cómo los niños representan menos del 17% de su población. Este envejecimiento global plantea retos significativos, desde la redistribución de recursos hasta el equilibrio entre las necesidades de una población cada vez más envejecida y la infancia.
¿Qué se puede hacer?
UNICEF insta a los gobiernos y líderes mundiales a tomar medidas inmediatas para abordar las tres “megatendencias” identificadas:
- Crisis climática: Invertir en infraestructuras sostenibles, servicios resilientes y sistemas de apoyo social.
- Brecha digital: Garantizar la conectividad y diseñar tecnologías seguras e inclusivas.
- Desafíos demográficos: Fortalecer los sistemas educativos y sanitarios para garantizar el desarrollo de la infancia, independientemente de las dinámicas poblacionales.
Una llamada a la acción
El informe concluye con un mensaje claro: el futuro de la infancia depende de las decisiones que tomemos hoy. "El Día Mundial de la Infancia nos recuerda que millones de niños aún ven vulnerados sus derechos. Garantizar su bienestar no es solo una obligación moral, sino una inversión en el futuro de nuestra sociedad", enfatizó Suárez-Pertierra.
Con el cambio climático como trasfondo y las desigualdades digitales y demográficas amplificándose, UNICEF hace un llamamiento urgente para priorizar a la infancia en todas las estrategias globales. Porque, en un mundo cambiante, proteger a los niños de hoy es garantizar el mañana.