La comunidad de Castrillón se encuentra consternada tras el hallazgo del cuerpo sin vida de Israel Hernández Jiménez, un vecino sin hogar de aproximadamente 70 años, conocido y apreciado por los habitantes de Piedras Blancas y Salinas. El cadáver fue encontrado el pasado jueves bajo un puente en la zona de Los Canapés, en Avilés, presentando signos evidentes de violencia, especialmente golpes en la cabeza.
Israel, natural de Castrillón, era una figura familiar en las calles del municipio. Durante años, se le veía acompañado de un carro y un burro, y solía tallar palos con una pequeña navaja mientras deambulaba por la zona. A pesar de los esfuerzos de los Servicios Sociales por mejorar su situación, él prefería vivir en la calle, manteniendo una rutina que incluía pedir dinero para café o tabaco, aunque este último hábito lo había dejado con el tiempo.
Los vecinos de Castrillón le tenían un especial aprecio. Muchos le ofrecían bocadillos y, en ocasiones, décimos de lotería. "Para los que somos de toda la vida de aquí, era uno más. Estaba muy integrado, tenía muy buen rollo hasta con los más jóvenes", comentan algunos residentes.
En los días previos a su muerte, Israel había sido visto en Avilés, especialmente en un supermercado cercano al lugar donde fue hallado su cuerpo. Se había trasladado allí tras recibir una notificación de expulsión del sitio donde solía pernoctar en Piedras Blancas. La noticia de su fallecimiento ha generado una profunda consternación entre quienes le conocían y apreciaban.
La Policía Nacional ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias de su muerte. El cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal en Oviedo para la realización de la autopsia que determinará las causas exactas del fallecimiento. Por el momento, no se descarta ninguna hipótesis, y las autoridades han solicitado la colaboración ciudadana para obtener información que pueda ayudar en la resolución del caso.
Este trágico suceso ha reavivado el debate sobre la vulnerabilidad de las personas sin hogar y la necesidad de implementar medidas más efectivas para su protección y asistencia. La comunidad de Castrillón lamenta profundamente la pérdida de Israel, recordándolo como una persona amable y querida por todos.