En la pasada madrugada, la Guardia Civil detuvo a un hombre de 46 años, de nacionalidad española, como presunto autor del violento ataque perpetrado el sábado en el Monasterio de Santo Espíritu del Monte, ubicado en Gilet, Valencia. El individuo, armado con palos y una botella, irrumpió en las habitaciones de los religiosos, hiriendo a siete de ellos mientras gritaba: "Soy Jesucristo y voy a matar a los frailes".
El ataque se produjo en la mañana del sábado, cuando el agresor accedió al recinto del monasterio y llegó hasta las habitaciones de varios religiosos, en uno de los pisos superiores.
Tras el ataque, el agresor huyó al monte, lo que desencadenó una intensa búsqueda por parte de las fuerzas de seguridad. Finalmente, fue detenido y trasladado al puesto de la Guardia Civil en Puçol, donde permanece a la espera de ser puesto a disposición judicial.
Las víctimas, de edades comprendidas entre 57 y 95 años, fueron atendidas por los servicios de emergencia. Uno de los monjes, de 76 años, sufrió un traumatismo craneoencefálico y fue trasladado al Hospital Clínico en estado crítico. Otros tres, de 57, 66 y 95 años, presentaron contusiones y fueron ingresados en el Hospital de Sagunto.
El Monasterio de Santo Espíritu del Monte, fundado en el siglo XV, es un lugar de retiro espiritual y oración, gestionado por la Orden de San Juan de Dios. La comunidad religiosa ha condenado enérgicamente la agresión y ha expresado su solidaridad con los hermanos heridos, al tiempo que ha pedido por la recuperación del agresor.
Este trágico incidente ha conmocionado a la comunidad local y ha suscitado un debate sobre la seguridad en los lugares de culto. Las autoridades han reforzado las medidas de protección en la zona y han instado a la ciudadanía a mantener la calma mientras avanzan las investigaciones.