La Guardia Civil de Asturias ha arrestado a un hombre de 74 años, residente en Mieres, acusado de incendiar un restaurante en el puerto de Pajares con el presunto objetivo de cobrar una indemnización de seguro valorada en 52.780 euros. La investigación reveló indicios claros de que el incidente fue premeditado, utilizando combustible y planificando meticulosamente cómo ocultar la evidencia. Este suceso tuvo lugar la madrugada del 2 de junio en un establecimiento de la N-630, que conecta el puerto de Pajares con la localidad de Lena.
El incendio fue reportado a las 4:00 a.m., y, gracias a la rápida intervención de los bomberos, se evitó la propagación de las llamas, aunque el restaurante sufrió importantes daños materiales. Las labores de extinción concluyeron sobre las 6:15 a.m., y no hubo personas en el establecimiento en el momento del incendio.
Claves de la investigación:
Los agentes comenzaron la pesquisa al notar que la puerta de entrada no presentaba signos de forzamiento, lo que desvió la investigación hacia la posibilidad de un incendio intencionado. En el lugar se hallaron pruebas contundentes, como una garrafa de gasolina parcialmente calcinada y focos de incendio estratégicamente ubicados: uno en la entrada, donde una cortina fue utilizada como mecha, y otro en un cuarto anexo. Además, una cámara de seguridad ubicada en la zona del primer foco había sido cubierta con papel de aluminio, lo que alertó a los investigadores sobre una posible maniobra para evitar ser identificado.
Al revisar las grabaciones de las cámaras, la Guardia Civil identificó a una persona que ingresó en el local durante la noche, moviéndose con seguridad en el entorno y cubriéndose para evitar ser reconocido. Además, se determinó que el móvil del sospechoso estuvo apagado durante el suceso y que el hombre no respondió a las alarmas del sistema de seguridad, lo que reforzó las sospechas de intencionalidad en sus acciones.
El motivo detrás del incendio
Las investigaciones revelaron que el restaurante había sido arrendado por el sospechoso, cuyo contrato de alquiler fue rescindido apenas días antes del incidente debido a problemas de pago. El seguro del local cubría incidentes como incendios, lo que condujo a las autoridades a considerar la hipótesis de fraude. Las acciones del detenido fueron calificadas como simulación de delito, intento de estafa y daños, delitos por los cuales fue arrestado el pasado 24 de octubre