La dimisión de Íñigo Errejón ha sorprendido a muchos en el ámbito político español, no solo por su repentino anuncio, sino por las complejas circunstancias que lo rodean. Su salida se ha vinculado a dos factores principales: las acusaciones de violencia machista que surgieron en redes sociales, y su propio agotamiento emocional tras una década en la primera línea política. Estas acusaciones, que han sido negadas públicamente por Errejón, involucran denuncias de maltrato psicológico que empezaron a circular en 2023, y que en los últimos días ganaron fuerza mediática. Como resultado, su partido, Sumar, abrió una investigación interna, lo que contribuyó a acelerar su decisión de abandonar la política.
Errejón mencionó en su comunicado que las exigencias de la política, especialmente desde la perspectiva masculina bajo el patriarcado, generaron un desgaste profundo en su salud mental y emocional. Argumentó que se encontraba en el límite entre el "personaje y la persona", haciendo referencia a la presión inherente a su rol público..
Errejón es una figura central en la política española de las últimas dos décadas. Se destacó inicialmente como uno de los fundadores de Podemos, partido que nació en 2014 como una fuerza insurgente de izquierda. Junto con Pablo Iglesias, Carolina Bescansa y Juan Carlos Monedero, Errejón fue parte de una de las transformaciones más importantes del espectro político en España. Desempeñó un papel clave en las primeras campañas electorales de Podemos, diseñando estrategias que llevaron al partido a obtener cinco escaños en las elecciones europeas de 2014.
No obstante, sus diferencias estratégicas con Pablo Iglesias, centradas en cómo debía evolucionar el partido, lo llevaron a distanciarse de Podemos y fundar Más Madrid en 2019, junto a la exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. Posteriormente, Más País se convirtió en su proyecto nacional, con el que se presentó a las elecciones generales de 2019. Errejón siempre abogó por una izquierda más pragmática y dialogante, en contraste con el enfoque más confrontacional de Iglesias.
Su integración más reciente en Sumar, la plataforma liderada por Yolanda Díaz, marcó un nuevo capítulo en su carrera. Aunque comenzó en un papel discreto, fue nombrado portavoz de la formación en 2024. Sin embargo, su renuncia abrupta cierra una década de influencia en la política española, dejando a Sumar en la búsqueda de un nuevo liderazgo.
Este episodio pone de relieve tanto las complejidades del desgaste personal en la política como las tensiones internas en las formaciones progresistas.