La Policía Nacional ha arrestado en Gijón a un joven de 26 años y nacionalidad brasileña tras descubrir que había presentado una denuncia falsa con la intención de que el banco le devolviera 1.480 euros. A principios de agosto, el implicado denunció el uso fraudulento de su tarjeta, afirmando que habían realizado once retiradas en efectivo en diferentes cajeros automáticos sin su consentimiento. Sin embargo, una revisión de las cámaras de seguridad mostró que el propio denunciante había realizado todas las transacciones durante un periodo de tres días.

El joven, cuyo objetivo era que la entidad bancaria asumiera las pérdidas y reintegrara el dinero a su cuenta, ha sido acusado de simulación de delito. Este tipo de conducta está contemplada en el Código Penal, y las consecuencias pueden incluir penas de prisión. La Policía ha advertido sobre la seriedad de presentar denuncias falsas, instando a la ciudadanía a actuar con responsabilidad.

Este caso pone de manifiesto un intento de fraude financiero que, aunque ha tenido poca repercusión en la tasa general de criminalidad de Gijón, destaca en un contexto donde los delitos cibernéticos y financieros han aumentado ligeramente. La detención se enmarca en una política estricta contra el uso indebido de los recursos judiciales y policiales.