Guillermo Peláez, consejero de Hacienda y Fondos Europeos del Principado, ha pedido en Bruselas que la futura política de cohesión de la Unión Europea priorice el reto demográfico, asegurando que territorios como Asturias, donde la despoblación afecta gravemente a las zonas rurales, reciban el apoyo necesario para impulsar su desarrollo. Durante su intervención en el pleno del Comité de las Regiones, Peláez insistió en que es crucial evitar nuevos desequilibrios territoriales y subrayó la urgencia de destinar fondos a la revitalización rural para ofrecer servicios públicos de calidad y atraer a nuevos residentes.
Asturias lidera actualmente en el Comité de las Regiones la iniciativa para incluir la cuestión demográfica en la agenda europea. El consejero destacó que el Principado ha sido clave en la elaboración de un dictamen que se votará en noviembre, y que aboga por una política de cohesión que tome en cuenta la problemática del despoblamiento.
Peláez se encuentra en Bruselas con motivo de la Semana Europea de las Ciudades y Regiones, que coincide con la sesión plenaria del Comité Europeo de las Regiones. En el marco de este evento, el consejero ha participado en el seminario "Visiones progresistas sobre la política de cohesión y la PAC", donde insistió en la importancia de respaldar a la industria asturiana y proteger el proceso integral de la siderurgia en la comunidad. “Es un proyecto vital no solo para Asturias, sino para toda Europa”, afirmó, enfatizando la necesidad de mantener el apoyo europeo en la modernización industrial de la región.
La transición energética del tejido industrial asturiano también fue un tema central en la agenda de Bruselas. Peláez abogó por la extensión del Fondo de Transición Justa más allá de 2027, destacando que este fondo es esencial para territorios como Asturias, que ha enfrentado una triple transición: el cierre de la minería, el desmantelamiento de las centrales térmicas y el actual proceso de transformación hacia una industria verde. “Mantener este fondo es un acto de justicia para nuestra comunidad”, declaró.
En cuanto a la Política Agraria Común (PAC), Peláez instó a las instituciones europeas a escuchar a los agricultores y ganaderos en la configuración de la futura política agraria. “Es fundamental que los profesionales del sector sean tenidos en cuenta en las decisiones que les afectan directamente”, subrayó, recalcando la importancia de una PAC que responda a las necesidades reales del campo asturiano y europeo.
Asturias, a través de la voz de Peláez, ha dejado claro en Bruselas que sus demandas no son solo regionales, sino que representan un modelo para construir una Europa más cohesionada y resiliente, capaz de afrontar los desafíos demográficos e industriales con una política de apoyo sólido y sostenido.
