Agentes de la Policía Nacional de la Comisaría Local de Langreo-San Martín del Rey Aurelio han detenido a un hombre de 45 años con un amplio historial delictivo, conocido como el cabecilla de la banda del SEAT León, dedicada a robos con violencia en gasolineras y farmacias de toda la región. La detención se llevó a cabo tras una investigación iniciada a mediados de septiembre, y pone fin a tres años de fuga del delincuente, quien llevaba tiempo escondido en un domicilio en el distrito de La Felguera.
Este individuo tenía pendientes cuatro órdenes de detención e ingreso en prisión, además de 17 órdenes de detención y personación. Su historial incluye 25 detenciones anteriores por delitos graves como robo con violencia, hurto, falsedad documental, amenazas, tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Con una trayectoria delictiva extensa y un alto grado de peligrosidad, su arresto representa una mejora significativa en la seguridad de la región.
La investigación y el golpe de suerte
La operación que culminó en su detención comenzó de manera fortuita cuando la Policía Nacional acudió a un inmueble tras recibir una denuncia por ocupación ilegal. Durante las gestiones en el lugar, uno de los agentes reconoció la voz del fugitivo, un viejo conocido de las fuerzas de seguridad de Langreo, que se encontraba en un piso inferior. Inmediatamente, se desplegó un dispositivo de vigilancia en las inmediaciones, y fue así como se logró arrestar al fugitivo cuando intentaba salir del domicilio. El detenido confesó a los agentes que llevaba tres años escondido en ese lugar.
Impacto en la comunidad
Con esta detención, la Policía Nacional retira de circulación a uno de los delincuentes más buscados de la región, autor de múltiples delitos graves, cuyo modus operandi involucraba actos de violencia para sostener su actividad delictiva. La operación ha sido recibida con alivio por los vecinos de Langreo, quienes se veían afectados por la actividad delictiva de esta banda. El arresto no solo representa un éxito operativo para la policía, sino también una mejora significativa en la convivencia y seguridad de los ciudadanos, tanto en términos objetivos como de percepción pública.