El Banco de Tierras de Asturias ha constituido un grupo de trabajo clave para fomentar el relevo generacional en las explotaciones agrícolas, en colaboración con las principales organizaciones agrarias de la región: Asaja, Coag y Uca, así como la Red Asturiana de Desarrollo Rural (Reader). Este equipo, liderado por el gerente del Banco de Tierras, José Ramón Feito, busca asegurar la continuidad y sostenibilidad de las actividades agrícolas mediante la sucesión en las explotaciones.
La creación de este grupo de trabajo responde a la necesidad urgente de abordar la falta de relevo generacional en el sector agrario, un problema que pone en riesgo el futuro del medio rural asturiano. En este sentido, el Banco de Tierras y Reader han anunciado que firmarán un protocolo de colaboración destinado a impulsar la sucesión en las explotaciones agrícolas, así como a difundir los diferentes programas y ayudas disponibles.
Nuevas ayudas para la sucesión en explotaciones
Una de las grandes novedades presentadas es la puesta en marcha de una nueva línea de subvenciones que forma parte del Plan Estratégico de la Política Agraria Común (Pepac). Estas ayudas están diseñadas para facilitar la transferencia de explotaciones a jóvenes agricultores, permitiendo que los profesionales cercanos a la jubilación rentabilicen sus inversiones, al tiempo que se fomenta la entrada de una nueva generación de agricultores.
Las subvenciones, que podrán alcanzar hasta 65.000 euros por explotación, buscan asegurar la viabilidad económica de las explotaciones agrarias y garantizar que continúen siendo competitivas y productivas en manos de nuevos profesionales. Para acceder a estas ayudas, será imprescindible formalizar un proyecto de cooperación entre la persona que se jubila y quien toma el relevo, mediante la cesión de la explotación a través de un contrato de arrendamiento o venta.
Promoción del uso y gestión de tierras rurales
Además de las ayudas directas a la sucesión, los once grupos de desarrollo rural de Asturias jugarán un papel activo en la promoción de otras iniciativas complementarias, como la permuta de fincas rústicas y la creación de una bolsa de arrendamientos rústicos con fines agrícolas y ganaderos. Estas iniciativas pretenden optimizar el uso de tierras y fomentar un uso sostenible y rentable del territorio rural asturiano.
El gerente de la Red Asturiana de Desarrollo Rural, Juan Antonio Lázaro, destacó la importancia de este tipo de colaboraciones para revitalizar el medio rural, señalando que estas acciones no solo apoyan a los jóvenes agricultores, sino que también contribuyen a la cohesión territorial y al desarrollo sostenible de las zonas rurales.
Una apuesta por el futuro del campo asturiano
Con estas iniciativas, el Gobierno del Principado refuerza su compromiso con el desarrollo del sector agrícola y ganadero de Asturias, asegurando que las nuevas generaciones puedan asumir el control de las explotaciones y garantizar su continuidad. Este plan integral no solo aborda los desafíos del relevo generacional, sino que también sienta las bases para un futuro rural más dinámico y resiliente.
La combinación de subvenciones, programas de cooperación y el apoyo institucional a la gestión de tierras subraya la voluntad de crear un entorno favorable para que el sector agrícola asturiano prospere en el largo plazo, mientras se asegura la sucesión de conocimientos y el relevo generacional que tanto necesita.