El negocio de la salud en España no se limita a los tratamientos médicos. Los pacientes hospitalizados, que ya enfrentan situaciones difíciles, se ven obligados a pagar por servicios esenciales como la televisión y el Wi-Fi, servicios que en muchos casos son una distracción crucial y un salvavidas emocional durante largas estancias. Lo que podría parecer un gasto menor se convierte en un auténtico negocio, y el impacto en los pacientes y sus familias es demoledor.
El coste del entretenimiento en los hospitales: ¿Cuánto pagamos?
En los hospitales asturianos, tras un breve periodo de gratuidad durante la pandemia de COVID-19, los pacientes deben pagar por ver la televisión. Las tarifas rondan los 0,5 euros por hora, 2,6 euros al día o 4,4 euros por dos días. Esta práctica no es única de Asturias; hospitales de toda España aplican tarifas similares, gestionadas por empresas privadas que ven en los servicios hospitalarios una oportunidad de lucro.
Por ejemplo, en el Hospital San Rafael de Madrid, el servicio de televisión cuesta 1,32 euros por hora y, en teoría, existen bonos de 4,80 euros por día o 17,50 euros por semana, aunque en la práctica, los pacientes a menudo se ven obligados a pagar tarifas más elevadas por problemas técnicos o falta de disponibilidad.
¿Quiénes se benefician?
En muchos casos, el servicio de televisión y Wi-Fi en los hospitales está externalizado a empresas privadas que pagan un canon al hospital para operar. ISERN S.A.U. es una de las principales empresas proveedoras en España, gestionando servicios en más de 100 hospitales, en su mayoría públicos. Estos acuerdos no solo generan ingresos para las empresas, sino también para los hospitales que cobran un porcentaje, a menudo a costa del bolsillo del paciente.
Impacto en la salud mental y física de los pacientes
Para los pacientes hospitalizados, el acceso a la televisión y al Wi-Fi no es un lujo, sino una necesidad. Diversos estudios respaldan la importancia del entretenimiento y la comunicación para mejorar el bienestar emocional y, por ende, la recuperación física. La falta de estos servicios puede aumentar el estrés, la ansiedad y el aislamiento, especialmente en pacientes de larga estancia(Mallorca Diario).
Iniciativas en otras comunidades: ¿Qué se está haciendo?
No todo es negativo. En algunas comunidades autónomas, como Valencia y Extremadura, el servicio de televisión en hospitales públicos es gratuito. Estas regiones han decidido asumir el coste, invirtiendo en el bienestar de los pacientes y reconociendo la importancia de estos servicios. Sin embargo, en muchas otras, los costes siguen siendo una carga adicional para los enfermos y sus familias.
Un sistema que necesita reformas urgentes
El cobro por servicios esenciales como la televisión y el Wi-Fi en hospitales no solo es una práctica anticuada, sino también inmoral. Es hora de que el Gobierno y las comunidades autónomas tomen medidas para garantizar que ningún paciente tenga que pagar por distracciones básicas que pueden mejorar su calidad de vida durante una estancia hospitalaria. En lugar de lucrarse a costa del sufrimiento, es necesario un enfoque más humanitario y accesible para todos.