El presidente del Principado garantiza la defensa de los intereses de Asturias en el Consejo de Política Fiscal y Financiera: “Nuestro planteamiento es el de siempre; el de ayer, el de hoy y el de mañana”
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, ha reafirmado hoy la postura histórica de su gobierno en materia de financiación autonómica, subrayando dos límites claros: el rechazo a que Cataluña abandone el régimen común y la oposición al principio de ordinalidad. En una rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, Barbón enfatizó: “Nuestro planteamiento es el de siempre; el de ayer, el de hoy y el de mañana”.
Postura firme sobre el régimen común y la ordinalidad
Barbón expresó su desacuerdo con el preacuerdo negociado entre el PSC y Esquerra Republicana de Catalunya, que sugiere un concierto fiscal para Cataluña similar al de País Vasco y Navarra. “Yo soy de los que quieren que Salvador [Illa] sea presidente”, afirmó Barbón, pero dejó claro que no apoya que Cataluña gestione sus propios ingresos y aporte una cantidad fija al Estado, ya que esto restaría recursos de la caja común.
Además, rechazó el principio de ordinalidad, que establece que las comunidades autónomas deben recibir en función de lo que aportan. Este principio beneficiaría principalmente a Madrid, Cataluña y Baleares y podría reducir la solidaridad interterritorial, algo que Barbón considera inaceptable.
Defensa de la multilateralidad y la solidaridad
El presidente del Principado insistió en que estas cuestiones deben debatirse en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde están representados el Gobierno central y todas las comunidades autónomas en igualdad de condiciones. Barbón abogó por la multilateralidad y defendió la importancia de un sistema de financiación que garantice la solidaridad entre territorios.
Apoyo constante a la financiación justa
Barbón recordó que la postura de Asturias no es nueva y está respaldada por acuerdos históricos y documentos oficiales, como el acuerdo alcanzado en 2020 por todos los grupos parlamentarios de la Junta General, salvo VOX; la Declaración de Santiago firmada por ocho gobiernos autonómicos en 2021; y las resoluciones del último congreso de la Federación Socialista Asturiana en 2022.
El presidente también destacó que estas posiciones están reflejadas en los programas electorales de la FSA y Convocatoria por Asturias, así como en el pacto de gobierno de 2024. “El contenido de estos documentos no deja lugar a dudas: es necesario reformar el obsoleto sistema de financiación, todas las comunidades necesitan más recursos, la multilateralidad y la solidaridad son indispensables, y Asturias precisa que se mejore la ponderación de factores como el envejecimiento demográfico, la dispersión poblacional o la orografía, porque todos ellos encarecen la prestación de los servicios públicos”, explicó Barbón.
Compromiso con los intereses de Asturias
Barbón reiteró su compromiso de defender los intereses de Asturias en cualquier foro, incluso si eso significa votar en contra del criterio del Ejecutivo estatal. “En cualquier foro en el que participemos, el Gobierno de Asturias hará valer su posición”, aseguró.
El presidente aprovechó también para recordar que la presidenta en funciones, Gimena Llamedo, y el consejero de Hacienda y portavoz, Guillermo Peláez, ya se habían pronunciado en defensa de los intereses asturianos, refutando así las críticas de silencio y tibieza lanzadas por la derecha en los últimos días.
Con esta reafirmación, Barbón deja claro que el Gobierno de Asturias continuará luchando por un sistema de financiación justo y equitativo, manteniendo siempre la coherencia y el compromiso con los principios de solidaridad y multilateralidad.
