Greenpeace alza la voz en Madrid: Urge adaptar las ciudades al calor extremo

Greenpeace alza la voz en Madrid: Urge adaptar las ciudades al calor extremo

Activistas de Greenpeace han llevado a cabo en la jornada de ayer una impactante protesta en la Plaza de Felipe II de Madrid, desplegando una pancarta de 30 metros con el mensaje: "Peligro, plaza no adaptada al calor extremo". Esta acción busca visibilizar la urgente necesidad de transformar los espacios urbanos para hacer frente a las olas de calor cada vez más frecuentes y severas, producto de la crisis climática.

Una plaza, un símbolo de la crisis climática

La Plaza de Felipe II, conocida por su vasta extensión de hormigón y la ausencia de sombra, se ha convertido en el emblema de la falta de adaptación de muchas áreas urbanas al calor extremo. "Este espacio representa lo que sucede en muchos municipios españoles, donde faltan zonas verdes que proporcionen refugio y promuevan la convivencia en condiciones de alta temperatura", declaró Elvira Jiménez, responsable de campañas de Greenpeace España.

Impacto del calor en la salud

Las olas de calor son uno de los fenómenos meteorológicos extremos más mortíferos en Europa. Según el Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo), entre 2022 y 2023, más de 8.000 personas murieron en España debido al calor extremo. Estudios indican que las mujeres son el doble de vulnerables al calor en comparación con los hombres. "El calor no solo agrava enfermedades preexistentes, sino que también tiene un impacto significativo en la salud mental y puede aumentar la tasa de suicidios", añadió Jiménez.

Falta de planificación en las ciudades

Greenpeace ha publicado el informe 'Adaptación de las ciudades al calor extremo: protección frente a los impactos en la salud', que analiza los planes de adaptación de 15 ciudades españolas. Los resultados son alarmantes: ninguna ciudad cuenta con un plan adecuado para enfrentar el calor extremo. Vigo y Guadalajara tienen los planes más deficientes, mientras que Barcelona y Zaragoza destacan, aunque con margen de mejora.

Demandas de Greenpeace

Greenpeace propone varias medidas urgentes para que los municipios se adapten mejor al calor extremo:

  1. Renaturalizar las ciudades: Aplicar la regla 3-30-300, que implica ver tres árboles desde casa, tener un 30% de cobertura vegetal en el barrio y un espacio verde a 300 metros.
  2. Red de refugios climáticos: Crear espacios públicos accesibles, cercanos y gratuitos, con zonas de descanso e hidratación.
  3. Planes de sombra y mapas de vulnerabilidad: Desarrollar infraestructuras que protejan a las personas en sus desplazamientos diarios.
  4. Medidas sociales de protección: Implementar acciones que aumenten la protección de los más vulnerables.

Una llamada a la acción

"La elaboración de estos planes es un primer paso positivo, pero deben ajustarse a la urgencia necesaria y avanzar en su implementación", concluyó Jiménez. "Adaptar los municipios al calor extremo no es una moda ni un capricho, es una cuestión de salud pública y equidad. Se trata de salvar vidas sin dejar a nadie atrás."

Con este llamamiento, Greenpeace insta a los ayuntamientos y a los ciudadanos a tomar medidas inmediatas para mitigar los efectos devastadores del calor extremo y a promover un entorno urbano más seguro y saludable.

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