- Se trata de toda una profesional de los hurtos que se dedica a viajar de una ciudad a otra buscando nuevas víctimas a las que engatusar y desvalijar.
- Por este procedimiento se le imputan dos robos en Oviedo y uno en León. También se la considera responsable del robo del piso de la persona que la había contratado como camarera y al que sustrajo más de 100.000 euros.
Oviedo, El Grupo IV de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Oviedo, especializado en la investigación de robos, inició hace dos meses una serie de indagaciones centradas en una mujer que al parecer se dedicaba a robar a los hombres por el procedimiento denominado “beso del sueño”.
Esta forma de robar consiste en que una mujer se dedica a visitar los bares y discotecas de la ciudad. Una vez allí, comienza a “ligar” descaradamente con alguno de los hombres que se encuentran en el lugar. Seleccionada su víctima, tras varias copas y una conversación más que animada, le propone acompañarle a su casa para tomar “la última copa”.
Una vez en su domicilio se las ingenia para verter una sustancia narcotizante en el vaso de su víctima que les deja inconscientes. Este es el momento que aprovechaba para desvalijarle.
A la mañana siguiente además de un fuerte dolor de cabeza y un vago recuerdo de lo que ha sucedido la víctima se percataban que le falta su dinero, las tarjetas y sus joyas.
El beso del sueño es una modalidad delictiva que puede ser muy peligra para la salud de la víctima, sobre todo si tenemos en cuenta que entran en juego varios factores absolutamente desconocidos para la ladrona, como son por ejemplo, si “su ligue”padece alguna patología, si está tomando alguna medicación o si la dosis es excesiva, etc.
El Grupo IV del Comisaría de Oviedo inició la investigación a raíz de la dos denuncias formuladas por dos hombres de Oviedo que fueron víctimas de sendos robos por el mismo procedimiento.
La investigación que desde entonces emprendió el grupo les llevó a determinar, no sólo, la identidad de la mujer, sino sobre todo, el hecho de que se estaba ante una auténtica profesional de los robos.
Tal es así, que cuanto se comenzó a reconstruir los estragos que habían provocado los tres meses que permaneció en Asturias se llegó a la conclusión que además de los dos robos anteriores, entre medias se había desplazado a León, donde había narcotizado a otro hombre, sustrayéndole 2.900 euros y su coche.
Además de salir por la noche a buscar posibles víctimas, se la considera responsable de la sustracción de las llaves de la casa de la persona que la había contratado como camarera de establecimiento de hostelería de Oviedo y al que sustrajo más de 100.000 euros.
El Grupo IV considera que esta mujer de 46 años y natural de Córdoba, ha abandonado Asturias en busca de nuevas víctimas a las que engatusar y desvalijar, por lo que ha ampliado el radio de acción a nivel nacional.