En una jornada conmovedora, Asturias ha rendido tributo a las almas valientes que enfrentaron el exilio durante la Guerra Civil y la dictadura franquista. La ceremonia, anclada en los principios de la Ley de Memoria Democrática, ha sido presidida por Delia Losa, delegada del Gobierno en Asturias, quien se ha reunido con exiliados y líderes de diversos colectivos dedicados a la memoria histórica.
Durante el evento, celebrado en el corazón de Oviedo, Losa ha reafirmado el compromiso del gobierno con el recuerdo y la justicia: “Es nuestro deber recordar y honrar a quienes sufrieron el exilio para asegurarnos de que las tragedias del pasado no se repitan. Debemos continuar trabajando por una sociedad que reniegue de los discursos de odio y que fomente la convivencia, el respeto y los derechos humanos.”
La cita ha contado con la participación de figuras prominentes en el ámbito de la memoria democrática, incluyendo a Begoña Collado, directora general de Memoria Democrática del Principado; Ángeles Flórez ‘Maricuela’, destacada exiliada; y Magdalena Antuña, quien lleva la memoria de sus familiares exiliados. También se dieron cita representantes de fundaciones y grupos clave en la investigación y divulgación de este período histórico, como la Fundación Anselmo Lorenzo, la Fundación Andreu Nin y la Asociación de los Niños de Rusia, entre otros.
Este encuentro ha servido no solo para rememorar y reflexionar sobre el doloroso legado del exilio, sino también para discutir sobre las políticas actuales de memoria histórica y las estrategias para educar a las futuras generaciones sobre la importancia de preservar la memoria colectiva.
El acto ha subrayado la importancia de mantener viva la historia de aquellos que, a pesar de las adversidades, contribuyeron a la construcción de un futuro más justo y democrático. En palabras de Losa: “Hoy, más que nunca, debemos recordar a aquellos que, con su sacrificio, nos enseñaron el valor de la libertad y la dignidad humana.”