Buenas noticias para los vecinos de la zona del edificio Flex: el Ayuntamiento de Gijón/Xixón asumirá el coste de su derribo y los trabajos estarán finalizados en septiembre.
Una solución definitiva al problema
Tras la negativa de la entidad bancaria propietaria a hacerse cargo de la demolición, el Consistorio ha tomado las riendas del asunto para dar respuesta a las demandas de los vecinos y eliminar de una vez por todas este foco de insalubridad y riesgo de derrumbe.
Un proceso ágil y transparente
El Ayuntamiento ya ha iniciado el expediente de contratación para la redacción del proyecto de demolición, que se espera recibir antes de finales de abril. En paralelo, se llevará al pleno del mes de mayo la modificación presupuestaria de 600.000 euros para llevar a cabo el derribo. Una vez aprobada, se licitará la obra y se estima que los trabajos estarán finalizados en septiembre.
Compromiso con los vecinos
"Nuestro compromiso con los vecinos de la zona es total", ha remarcado el segundo teniente de Alcaldesa y concejal de Urbanismo, Jesús Martínez Salvador. "Les dijimos que no íbamos a fallarles y no lo hemos hecho", ha incidido.
Un paso adelante para la mejora urbana
La demolición del edificio Flex supondrá un importante paso adelante para la mejora urbana de la zona, eliminando un elemento que suponía un riesgo para la seguridad y la salud pública, y contribuyendo a la regeneración del entorno.
