El Gobierno de Asturias ha conseguido un triunfo histórico para el sector agrario. El Ministerio de Agricultura ha asumido las medidas más importantes propuestas por el Principado para flexibilizar la Política Agraria Común (PAC), una reforma que aliviará la carga administrativa y económica de los agricultores y ganaderos asturianos.
Un cambio radical para el campo asturiano
Cerca del 60% de las propuestas asturianas han sido aceptadas por el Ministerio, incluyendo medidas tan relevantes como la voluntariedad del cuaderno digital, la eliminación de controles a las pequeñas explotaciones y la flexibilización de los ecorregímenes.
Beneficios para todos los agricultores
Las nuevas medidas de la PAC beneficiarán especialmente a las pequeñas explotaciones, tan numerosas en Asturias. Se les eximirá de controles y sanciones, simplificando enormemente su gestión diaria.
Más flexibilidad para la siega y el barbecho
Los agricultores asturianos podrán elegir el período de descanso de la siega entre mayo y septiembre, y se eliminará la obligación de dejar parte de la tierra en barbecho cuando se trate de elementos no productivos.
Adiós al cuaderno digital obligatorio
El uso del cuaderno digital y las fotos georeferenciadas será voluntario, una victoria para los agricultores que protestaban por la excesiva carga administrativa que suponía.
Un futuro más verde y próspero para el campo asturiano
Las medidas de flexibilización de la PAC, junto con las propuestas asturianas para exceptuar al maíz forrajero y la fertilización sostenible de las restricciones, contribuirán a un campo asturiano más verde, eficiente y próspero.
Un trabajo conjunto para el éxito
El éxito de las propuestas asturianas es fruto del trabajo conjunto del Gobierno del Principado, las organizaciones agrarias (Asaja, Coag, Uca, Ura y Usaga) y Cooperativas Agroalimentarias.
La PAC del futuro, ya en marcha
Se espera que la Unión Europea apruebe las principales propuestas asturianas, lo que marcará un antes y un después en la aplicación de la PAC en Asturias. El campo asturiano tiene por delante un futuro más verde, flexible y próspero.