Gijón, 19 de febrero de 2024 – Un escalofriante suceso conmocionó al barrio de Contrueces en Gijón este fin de semana. Una pareja joven, de 25 y 23 años, fue brutalmente atacada por su propio perro, un American Stanford Terrier, catalogado como raza potencialmente peligrosa. El hombre sufrió graves heridas en el brazo y la pierna, mientras que la mujer recibió lesiones de menor consideración en el brazo.

Un escenario dantesco:

El ataque se produjo en la mañana del sábado en un domicilio del número 6 de la calle Río Narcea. Según testigos, el hombre bajó por las escaleras ensangrentado, mientras la mujer pedía auxilio a gritos. La escena del crimen era dantesca, con abundante sangre en las escaleras del edificio.

Un animal imponente:

Los vecinos del inmueble relataron que el perro, de gran tamaño y porte imponente, nunca había mostrado agresividad hacia ellos. Sin embargo, algunos mencionaron que lo sacaban a pasear a una zona verde alejada de las viviendas, lo que genera dudas sobre su manejo y control.

Investigación en curso:

La Policía Nacional se encuentra investigando las circunstancias del ataque. El animal fue retirado del domicilio y trasladado a un albergue de manera preventiva. Se espera que las pesquisas determinen las causas del comportamiento del perro y las responsabilidades en este terrible suceso.

Consecuencias del ataque:

La pareja fue trasladada al Hospital de Cabueñes, donde la mujer recibió el alta médica el mismo día. El hombre, por su parte, permanece ingresado con lesiones de mayor gravedad. El futuro de la mascota aún es incierto, y dependerá de la decisión que tomen sus dueños tras este traumático episodio.

Un debate sobre las razas peligrosas:

Este nuevo ataque reabre el debate sobre la tenencia de perros de razas potencialmente peligrosas. Es crucial que los propietarios de estos animales tomen las medidas de seguridad necesarias para evitar tragedias como la que ha conmocionado a Gijón.