Las pescaderías tradicionales españolas se encuentran en una situación crítica, con miles de negocios cerrados en los últimos años y una rentabilidad cada vez más difícil. La burocracia excesiva, las exigencias desmedidas y la competencia desleal de productos de terceros países están poniendo en riesgo la supervivencia de este sector vital para la economía española y la dieta saludable.

En una reunión de urgencia, FEDEPESCA, la patronal de las pescaderías tradicionales, ha decidido sumarse a las movilizaciones del sector primario. Los pescadores, acuicultores y comerciantes especializados en productos del mar se unen en una lucha por un futuro sostenible y justo para la cadena alimentaria.

Las principales razones de la protesta son:

• Exceso de burocracia: Los pequeños comerciantes se ven ahogados en una maraña de normativas imposibles de cumplir, como la obligación de registrarse como productores de envases o la verificación de básculas cada dos años.
• Competencia desleal: Los productos de terceros países, que no se ajustan a las mismas exigencias que los europeos, inundan el mercado a precios más bajos, poniendo en riesgo la producción local.
• Precios justos: Las pescaderías tradicionales no pueden competir con las grandes superficies en la guerra de precios, y necesitan un margen de beneficio que les permita cubrir sus costes y mantener la calidad de sus productos.

Las pescaderías tradicionales son un pilar fundamental de la economía española:

• Generan miles de empleos: Más de 18.000 personas trabajan en este sector, que se ve amenazado por la falta de rentabilidad.
• Promueven la dieta saludable: Los productos frescos y de temporada que ofrecen las pescaderías son esenciales para una alimentación equilibrada.
• Fomentan el comercio local: Las pescaderías tradicionales son un elemento esencial del tejido comercial de las ciudades y pueblos de España.

Las movilizaciones del sector primario son una llamada de atención a las autoridades:

• Es necesario simplificar la normativa y reducir la burocracia.
• Se deben establecer medidas para proteger la producción local y evitar la competencia desleal.
• Es fundamental garantizar un marco legal que permita a las pescaderías tradicionales obtener un precio justo por sus productos.

El futuro de las pescaderías tradicionales está en juego. Si no se toman medidas urgentes, este sector vital para la economía española y la dieta saludable podría desaparecer en los próximos años.